Juventud Rebelde - Diario de la Juventud Cubana

Los agradecidos siempre defenderemos a Cuba

Son muchas las personas en el mundo que, como la ecuatoriana Karen Katherine Benegas, alzan su voz en defensa de la causa de nuestro pueblo. Juventud Rebelde tuvo la oportunidad de conversar con esta joven valiosa que se declara admiradora de nuestro proyecto social

Autor:

Raciel Guanche Ledesma

Antes de conocer a Karen Katherine Benegas, un buen amigo me había comentado sobre su amor por Cuba, la Revolución y por la historia de esta isla pequeña en extensión e inmensa en valores y calidez humana. Uno siempre se siente a gusto cuando encuentra personas así, que rompen cualquier barrera aislante para tender luego, con determinación, un puente de solidaridad.

Durante el desfile inaugural del Festival Mundial de la Juventud, realizado en Sochi, Rusia, recientemente, pude ver a esta joven ecuatoriana mientras aclamaba a toda voz, junto a los delegados cubanos a la magna cita, la contundente frase de: ¡Viva Fidel! Ahí supe, además de la pasión que la mueve y sustenta, que la defensa de las causas más nobles y justas le brota de forma natural, sincera.

Katherine podía haber estado ese día desfilando con algún traje típico de su patria sudamericana; sin embargo, prefirió, austera, caminar sin galas alrededor del parque olímpico de Sochi para alzar el reclamo en favor del pueblo palestino y de una Cuba sin bloqueo. Ya graduada de Economía por la Universidad Técnica de Machala, en Ecuador, a esta muchacha parece no temblarle el pulso en ningún momento: marcha, estudia y sueña sin utopías la Revolución.

—¿Cómo descubres a Cuba?

—Durante mi juventud he acompañado las luchas de los trabajadores rurales de la costa ecuatoriana por precios justos, salarios dignos y el derecho a la tierra. Me eduqué en el Marxismo-Leninismo y, por tanto, creo en la lucha de clases, en las luchas de liberación nacional, en la revolución socialista, y en la Revolución Cubana.

«Pienso que nuestros esfuerzos por construir un mundo nuevo no pueden alejarse en ningún momento de la solidaridad internacionalista. Y para nosotros, los revolucionarios, defender la Revolución Cubana significa defender la causa socialista de toda América Latina».

—¿De qué manera es vista la Revolución Cubana en el pueblo ecuatoriano?

—Para muchos ecuatorianos el proceso revolucionario que ha atravesado Cuba no es muy conocido, sin embargo, se conoce sobre los logros en las áreas de la ciencia, la cultura, salud y deporte, porque pese a las dificilísimas circunstancias y limitaciones, Cuba siempre ha prestado su mano solidaria a diversos países del mundo, y en Ecuador viven dignos, talentosos y valerosos representantes del pueblo cubano que cooperan principalmente en las áreas de educación y asistencia médica.

«Yo nací con un problema congénito en la vista, y cuando cumplí tres años fueron los médicos cubanos quienes me operaron y me dieron la oportunidad de tener una mejor calidad de vida. Cuando cumplí 17 años decidí estudiar música, y tuve la oportunidad de que otra talentosa cubana me enseñara. Pienso que, de esa manera, muchos niños y jóvenes latinoamericanos hemos conocido a su país.

«Los medios cómplices y vendidos al imperialismo hacen su trabajo para desprestigiar y desestabilizar al Gobierno que lidera el Presidente Miguel Díaz-Canel Bermúdez, pero los revolucionarios y diferentes organizaciones de izquierda cumplimos con nuestro deber, organizándonos y alzando la voz en todo momento contra las agresiones de Estados Unidos al pueblo cubano. La Isla del Caribe es una nación digna. Por eso los agradecidos siempre la defenderemos».

—El movimiento de solidaridad con Cuba en el Ecuador es uno de los más activos de Latinoamérica.

—La Coordinadora Ecuatoriana del Movimiento de Amistad y Solidaridad con Cuba (Cemasc) es un frente que agrupa a diversas organizaciones revolucionarias y progresistas, identificadas con la defensa de la Revolución Cubana y con la solidaridad entre los pueblos.

«La Cemasc cuenta con un consejo y cumple su agenda en diferentes provincias del país, la cual tiene como objetivo principal generar acciones de apoyo hacia el pueblo cubano y su Revolución. Todos los años se organiza la Asamblea de solidaridad y de amistad con Cuba, en la que se exponen informes las respectivas comisiones y se discuten las futuras acciones de solidaridad: tanto culturales, académicas y de movilización.

«Es un movimiento muy activo. Desde diferentes rincones de nuestra patria y junto a la Embajada de Cuba en Ecuador se han organizado marchas, plantones, pronunciamientos, vigilias contra el bloqueo y demás medidas coercitivas de Estados Unidos que afectan al pueblo. Además, hemos hecho jornadas culturales y de muralismo, homenajes a figuras históricas relevantes de Cuba y jornadas académicas dentro de la Cátedra Fidel Castro Ruz.

«He tenido la oportunidad de participar en muchas de estas actividades en Quito, Guayaquil y Machala; y recuerdo especialmente haber acompañado los plantones en el año 2021, secundando consignas del Presidente Díaz-Canel en momentos donde se habían agravado las agresiones del Gobierno estadounidense, y cuando Cuba necesitaba más que nunca el respaldo de América Latina.

«Siento con orgullo el hecho de estar y de alzar la voz, como sucedió en la proclamación de la Declaración de Guayaquil en el marco de la Vigésima Asamblea Nacional de Solidaridad con Cuba, el 8 de octubre de 2022 en la que, además, se rindió homenaje al Comandante Ernesto Che Guevara; y ayudé a organizar la jornada de homenaje por el sexto año de la desaparición física del Comandante en Jefe, Fidel Castro Ruz».

—¿Crees que aún la Revolución Cubana irradia con el ejemplo a la izquierda latinoamericana?

—Cuba fue el primer país de América en tomar el poder por asalto, romper las cadenas que lo ataban a la dominación del imperialismo yanqui y construir su socialismo, por lo que fue y sigue siendo el faro de dignidad que guía a los pueblos de América Latina a luchar por su liberación. Es la muestra clara y concreta de que el socialismo sigue siendo el destino al cual debemos aspirar los pueblos oprimidos del mundo.

—¿Qué opinión te merece el bloqueo estadounidense impuesto a nuestro país?

—El bloqueo económico, comercial y financiero es una acción ilegal, arbitraria y gravemente lesiva a los derechos del pueblo cubano. Las agresiones y medidas coercitivas en el plano comercial, financiero y humanitario son los intentos desesperados del imperialismo por acabar con el proceso de edificación del socialismo en Cuba.

«Sin embargo, pese a todos los esfuerzos de desprestigio y desestabilización durante 65 años, el Gobierno cubano ha sabido construir su proyecto social en las más adversas circunstancias, ha brindado las más plenas garantías a sus ciudadanos y ha logrado aglutinar la voluntad de miles de cubanos para defender la patria como el más grande honor y deber.

«Así es como, pese a ser un pequeño país, agredido política y económicamente, durante la pandemia de
COVID-19 lograron la creación de vacunas y, además, brindaron su solidaridad a otras naciones. Ese ejemplo de heroísmo, laboriosidad, dignidad y patriotismo en medio de las más difíciles circunstancias y agresiones es lo que el Gobierno estadounidense en todo este tiempo no puede perdonar».

—¿De qué forma puede seguir creciendo la información sobre el tema?

—Buscamos condenar las agresiones que afectan al pueblo cubano desde los diferentes espacios que el Movimiento de Solidaridad con Cuba y todas las organizaciones identificadas con la Revolución proyectan. El propio movimiento es una vía para que los ecuatorianos conozcan y se acerquen para comprender la realidad cubana y la verdad que defienden. Tengo entendido que hace pocos días, el Consejo Nacional de la Coordinadora Ecuatoriana se ha pronunciado concretamente para que Ecuador mantenga su voto en las Naciones Unidas contra el conjunto de sanciones que implica el bloqueo.

—¿Qué mensaje pudieras dejarles a los cubanos?

—Lo principal es decirles que Cuba no está ni estará jamás sola en su lucha, cuenta con el respaldo de miles de jóvenes latinoamericanos dispuestos a defender la Revolución y sus conquistas. No es de palabra, si lo digo es porque lo siento de todo corazón.

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