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Diosvany Acosta Abrahantes, miembro del Buró Nacional de la UJC, participó en la entrega del más importante premio literario de la AHS. Autor: Abel Rojas Barallobre Publicado: 12/02/2020 | 11:16 pm
Los premios Calendario 2020 —los más importantes que cada año otorga la Asociación Hermanos Saíz de conjunto con la Casa Editora Abril— fueron entregados este miércoles, en la sala Nicolás Guillén de la Fortaleza San Carlos de la Cabaña, en el contexto de la 29na. Feria Internacional del Libro de La Habana.
Cerca de un centenar de textos compitieron por el lauro en esta edición del concurso. De ellos, según dieron a conocer miembros del jurado, resultó ganador Player (Carlos Daniel Sarmiento), en la categoría Teatro, por sus valores dramáticos, eficacia, dinamismo, intensidad del diálogo y coherencia con la situación y el espacio escogido, pero, sobre todo, por la potencialidad del texto y lo bien logrado de la puesta en escena.
Igualmente, se distinguió Cúmulos (Reinaldo García), en el apartado Ciencia Ficción, por su fragmentada visión de un futuro distópico y su trama estructurada a partir de cuentos que, entremezclados entre sí forman parte de una suerte de novela en la que el todo es siempre algo más que la simple suma de las partes.
También se premió Cartas de amor para una historia interminable (Elaine Vilar), en Literatura Infanto-juvenil, —se convocó esta vez a competir con cuadernos de poesía—, por la madurez en el tratamiento de las relaciones entre adolescentes mediante un discurso que explora el mundo interior de ese grupo etario, alejado de estereotipos o lugares comunes, y en el que sobresale el lirismo, la belleza y la emoción que deben acompañar a la poesía.
El jurado entregó también el lauro en las categorías Ensayo, Narrativa y Poesía. El primero de ellos fue para Mujer y cooperativa urbana en Cuba desde la economía feminista. Estudio de caso de la cooperativa Model (Maura Febles), por su originalidad, necesidad de la temática tratada, y la estructuración de un ensayo que obedece a los propósitos de la investigación, con una prosa clara, concisa y atractiva; mientras que el de Narrativa, categoría en la que se incluyó por vez primera la novela, lo obtuvo la obra Do not disturb (Ariel Fonseca), por armar bien una historia con un buen uso del lenguaje y la creación de personajes bien diseñados.
En Poesía, categoría en la cual se presentó el mayor número de trabajos, el lauro correspondió a Madera (Rubiel Alejandro González), por tratarse de un libro unitario que revela, a través de la madera, al individuo inmerso en el devenir contemporáneo de la nación.
Durante la ceremonia fueron presentados y puestos a la venta los textos ganadores en la edición anterior del concurso.
