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Cuando el beisbol se parece al cine tendrá su presentación en el Centro Cultural Dulce María Loynaz el viernes 29 de abril, a la 1:00 p. m. Autor: Cortesía del entrevistado Publicado: 26/04/2022 | 11:22 pm
Con mucho de metáfora y la misma exactitud de siempre hace presencia en el mundo de las letras cubanas Norberto Codina. En esta ocasión, el Premio Nacional de Edición 2021 reaparece en la 30ma. Feria Internacional del Libro de La Habana con una sustanciosa obra de más de 300 páginas y ocho capítulos. Cuando el beisbol se parece al cine resulta deleite para el fanático y un firme primer paso para todo aquel que desconozca por qué este bellísimo deporte es patrimonio inmaterial de la nación.
Codina, el eterno director de La Gaceta de Cuba que gusta de conversar del beisbol sin acento, explica a Juventud Rebelde los caminos que lo motivaron a brindar testimonio sobre toda una efusión y expresión social.
«Es cultura en su sentido más integral, donde se religa el deporte, la historia, la identidad, los orígenes y el desarrollo de la disciplina beisbolera entre nosotros. La evocación de varias de nuestras figuras emblemáticas, tanto de la pelota, como del arte y la literatura. Tiene mucho de anecdotario y crónica, en lo que me gusta llamar “prosa varia” o “género anfibio”. Tal vez lo que mejor define su argumento sea algo tan subjetivo como puede ser la admiración por sus protagonistas, el conocer de sus contextos, y sobre todo la pasión “en cada párrafo” —como definiría Luciano Castillo—, por reconocer a la pelota como parte de nuestro patrimonio cultural».
Publicado por el sello Ediciones Icaic, Cuando el beisbol se parece al cine es un entramado de análisis y significados que interrelaciona «la pelota» con diversas manifestaciones del arte y otros elementos propios de la cultura popular.
«Claro, ante todo está dirigido a los seguidores del deporte, pero pensando en brindar una imagen calidoscópica, más allá de compartimentos estancos de beisbol, cultura e identidad, considerado por igual para un público más amplio. De ahí que he tenido la satisfacción de que entre sus lectores más entusiastas se encuentren nombres respetados de nuestra cultura, que a su vez para nada les interesa la pelota, como Reinaldo González, Francisco López Sacha o Luciano Castillo».
Según el autor, encontró el primer antecedente en su temprana pasión por este deporte. Siendo estudiante ya escribía textos sobre los campeonatos nacionales. Sin embargo, los argumentos «más cercanos y decisivos fueron un largo artículo incluido en la selección de Félix Julio Alfonso López, Con las bases llenas (2008); y mi libro Cajón de bateo, por Ediciones Matanzas (2012), sin dudas la primera versión del título que nos ocupa. Además, posee afinidad con otros títulos publicados por el propio Félix Julio —a mi consideración el mejor estudioso de este tema—, con los del ya fallecido Peter C. Bjarkman; y ese clásico que es La gloria de Cuba, de Roberto González Echevarría».
Cuando el beisbol… regala pasajes y anécdotas emanadas de una pluralidad de voces cubanas y universales que van desde Lezama Lima hasta Marlon Brando. Esta riqueza testimonial resulta uno de los puntos más sólidos de la investigación.
«No disfruto escribir, es decir, el acto de sentarme a encadenar palabras, líneas, hasta lograr sucesivas cuartillas. Pero sí disfruté mucho en este caso la búsqueda de diferentes datos y pasajes; la exploración asociada a la investigación de lo textual y lo intertextual; el intercambio con numerosos colegas; y sobre todo, el azar, que fuera un generoso aliado de estas páginas, y que me alegró con cada hallazgo. Aunque como diría Hemingway de la inspiración y su posible existencia: “El albur —que por demás existe—, cuando aparezca que me encuentre trabajando”».
«Cada autor pretende que su libro sea único y diferente—desentraña Codina—. Aquel texto que mencioné publicado por Félix Julio hace tres lustros se llamó: Cajón de sastre. Algunas claves personales y prestadas entre beisbol y cultura. Después como libro devino en Cajón de bateo. Ahora Cuando el beisbol… Pero siempre ha pretendido ser un “cajón de sastre”, en la definición más noble de la socorrida imagen. Y con esos retazos hilar un tejido que sea todo lo diverso, inclusivo y maravilloso que es nuestro deporte nacional, nuestra cultura y nuestro país».
En esta Feria se estrenará la versión digital ampliada de Cuando el beisbol se parece al cine, una obra que se extenderá hasta las 500 cuartillas, contará con un noveno capítulo y una veintena de anexos.
Codina apunta con total acierto a una prosa limpia y un estilo directo. Sus páginas, de complejidad analítica y abundante información, se suceden sin apenas esfuerzo, y esto para una obra de tal tamaño deviene en significativa virtud.
«Para resumir todo lo antes expuesto, traigo a colación un fragmento de mis palabras al lector: “Aquí se rencuentran, si no todas, muchas obsesiones compartidas, y compiladas algunas claves personales y prestadas acerca de la relación entre beisbol, cultura, cine, literatura e historia, que al final todo suele ser lo mismo”».
