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La prosperidad del surco requiere integración, ciencia y conciencia

Poco tiempo llevan en marcha las 63 medidas para dinamizar la producción agrícola y poder medir objetivamente su impacto, pero los productores ya dan fe de sus beneficios

Autor:

Marianela Martín González

Con una mirada objetiva sobre la marcha de la implementación de las 63 medidas para dinamizar la agricultura, el titular del ramo, Ydael Pérez Brito, pasó revista al tema en presencia de los diputados, como parte de las actividades previas al 8vo. Período Ordinario de sesiones de la Asamblea Nacional del Poder Popular, en su 9na. Legislatura, previsto para hoy y mañana.

Para hacer efectivo el paquete de medidas, Pérez Brito aseguró que se requiere de un esfuerzo colectivo de todos los organismos de la Administración Central del Estado, responsables junto con los gobiernos locales de la preparación, divulgación y capacitación de los actores que lo implementarán.

Explicó que para lanzar estas medidas hubo un proceso de diagnóstico, en el cual se identificó una marcada centralización del sistema empresarial agropecuario en las organizaciones superiores de dirección del Estado, empresas nacionales y provinciales, limitante para que los municipios dispongan de una base económica productiva propia para gestionar, sobre las bases de sus competencias, la soberanía alimentaria y nutricional en función de su estrategia de desarrollo.

Con mirada promisoria, el funcionario también se refirió al trabajo realizado por la dirección de la Agricultura Urbana para identificar las cerca de 60 unidades empresariales de base con condiciones para transitar a granjas urbanas, empresas o mipymes estatales, a partir de la diversificación de sus producciones.

Igualmente, transmitió confianza al referirse a la propuesta de reordenamiento de la Empresa Productora y Comercializadora de Semillas con alto valor genético, el cual concluirá en el primer semestre de 2022.

Medidas financieras para favorecer productores

El Ministro de la Agricultura explicó que, como fortaleza para avanzar en la concreción de la estrategia de desarrollo agropecuario, se tiene identificado lo que podemos producir en nuestro país, y se trabaja para la producción paulatina de leche, maíz, arroz y frijol, en la medida en que pueda disponerse de financiamiento.

También aseguró que se ejecutan subsidios temporales a las producciones cafetaleras, así como de maíz, arroz, tomate y leche. Entretanto, se cuenta con un respaldo parcial, por prioridades y de acuerdo con la disponibilidad financiera de los grupos empresariales y la liquidez del Gobierno central, para la electrificación de las inversiones productivas que concluyen este año, la puesta en explotación de equipamientos de riego adquiridos con crédito saudí, así como para proyectos de colaboración internacional.

Entre los desafíos remarcados por el titular de la Agricultura destacan contribuir a la consolidación del Plan de Soberanía Alimentaria y Educación Nutricional, y fortalecer el control sobre el uso y tenencia de la tierra y la atención a los usufructuarios.

A la industria alimentaria le urge encadenarse

Por el indiscutible impacto en la industria alimentaria de las 63 medidas aprobadas para dinamizar las producciones agropecuarias, el ministro del ramo, Manuel Sobrino Martínez, enfocó su intervención ante el Parlamento en aquellas con mayor incidencia en el plantel industrial.

En tal sentido, manifestó que independientemente de la compleja situación económica que atraviesa el país debido al bloqueo y la crisis provocada por la pandemia de la COVID-19, existen aspectos subjetivos que han influido en los resultados del ramo, reportó la Agencia Cubana de Noticias.

Entre ellos mencionó la deficiente gestión empresarial y aplicación de la ciencia en los procesos productivos, el insuficiente vínculo con las formas productivas, la mala contratación o calidad en los contratos, los impagos a productores y precios no estimulantes de las materias primas agrícolas.

Sobrino Martínez reconoció que estas deficiencias se tuvieron en cuenta en el diseño de las 63 medidas para dinamizar la agricultura, y a partir de su implementación en el mes de mayo, comenzó una nueva etapa de contacto, discusión y contratación de la industria con los productores, lo cual permitió contactar con 84 266 productores de leche, comprometiendo 341 505 100 litros.

Esto representa 1 788 300 litros por encima de la contratación inicial de 2021, añadió Sobrino Martínez. Asimismo, se contactaron a 45 300 productores de carne, quienes se comprometieron a aportar 101 655 toneladas de carne vacuna y equina, que representa 1 112 toneladas por encima de lo pactado.

No obstante, significó que en este tiempo no se llegó a la totalidad de los tenedores de ganado, lo cual se vio afectado, fundamentalmente, por la situación epidemiológica existente, también señaló que faltó calidad en la contratación, por lo que no se realizó en todos los casos productor a productor.

El titular de la Industria Alimentaria dijo que continuaron presentando incumplimientos en la entrega de carne contratada y los precios aprobados por litro de leche no cubren los costos reales en los que incurren los productores, generando desmotivación, desvíos y reiterados incumplimientos.

Lo antes expresado provocó que se volvieran a evaluar en octubre por la dirección del Gobierno los temas relacionados con este asunto y se decidió aprobar, entre otras medidas, el incremento del precio del litro de leche a 20 pesos y que el productor una vez que cumpla su contrato con la industria puede comercializar los excedentes a precios por acuerdo con ese u otros destinos.

Se organizó un programa, que culmina el 31 de marzo, para que el productor cobre la leche diariamente, además de los productos agropecuarios que entrega a la industria. Asimismo, se destinó un estímulo monetario por sobrecumplimiento, con lo cual podrán abastecerse de materias primas.

La aplicación de las medidas ha provocado un perfeccionamiento de las estructuras que tienen a cargo la contratación y el vínculo permanente con el productor para dar seguimiento a los compromisos.

El titular destacó que se está aplicando para el personal vinculado al acopio de materias primas un sistema de pago que los vincula directamente con los resultados y se desarrolla un amplio proceso de informatización. Además, comentó que se han propuesto nuevas formas de gestión, entre ellas mipymes, para realizar de manera más efectiva esta actividad.

Sobrino Martínez expresó que se avanza en las relaciones de trabajo con la Asociación Nacional de Agricultores Pequeños para la acción conjunta y que las ideas se conviertan en proyectos de desarrollo local que tributen al desenvolvimiento de los municipios en correspondencia con la política aprobada.

Resaltó que entre los desafíos de la industria alimentaria está concretar y consolidar el Programa de Desarrollo para ir asimilando los crecimientos previstos de materias primas agrícolas, así como asegurar la transformación del sistema empresarial y aumentar su eficacia.

Otros retos mencionados por el Ministro estuvieron vinculados a la contratación productor a productor, con la calidad requerida y el rigor en el cumplimiento del contrato, además de encadenar las medidas con los programas de desarrollo municipales, estrechar las relaciones de trabajo de las industrias con las juntas directivas de las cooperativas y sindicatos agropecuarios.

De igual forma, refirió que resulta necesario implementar un programa de comunicación que impacte en los actores y seguir desarrollando la informatización en los procesos de contratación y en la vinculación con las bases productivas.

El Ministro de Agricultura aseguró que urge avanzar en la concreción de la estrategia de desarrollo agropecuario.

La contratación productor a productor, con la calidad requerida, está entre los retos del Ministerio de la Industria Alimentaria, al decir de Manuel Sobrino Martínez, su titular.

 

Producir más para bajar precios 

Tras la presentación de ambos ministros, el diputado Emilio Interián Rodríguez dijo sentirse orgulloso al ser testigo de lo que hace la dirección del país para que la agricultura suelte amarras y sea el productor el eslabón más importante de la cadena agroproductiva.

Afirmó que se respira un ambiente favorable porque las tarimas están más abastecidas, a pesar de los altos precios que todavía fustigan a la población, los cuales no van a descender con la fijación de precios, sino con mayor oferta a partir del aumento de la producción.

Interián Rodríguez dijo que en aras de salvar lo logrado en el programa porcino, entre ello, la genética, los decisores de la política agropecuaria deben reunirse con los mejores productores para explorar las potencialidades existentes en cada territorio y buscar alternativas que permitan paliar los déficit de pienso que han deprimido la producción porcina.

Por su parte, el diputado Sergio Rodríguez Morales, director del Instituto Nacional de Investigaciones de Viandas Tropicales (Inivit), se refirió al compendio de medidas como herramienta para disminuir el costo de los insumos agrícolas. Crea, además, un escenario favorable para mitigar el impacto de la falta de alimentos, según refirió.

«Sabemos que no todo puede producirse, pero estamos importando alimentos que pudieran lograrse en el país. Estamos cada vez con el barco más lejos y más caro», declaró el parlamentario a Juventud Rebelde, al tiempo en que se refirió a un programa para la siembra de yuca que viene perfilándose en el territorio nacional, teniendo en cuenta las bondades de esa vianda, declarada por la ONU el alimento del siglo XXI.

Rodríguez Morales expresó que es muy poco el tiempo que llevan en marcha estas medidas para medir objetivamente su impacto, pero que fueron concebidas para favorecer a los productores que son, junto con los investigadores, quienes tienen sobre sus hombros la tarea de hacer próspero el campo.

El director del Inivit refirió que aunque estas medidas son muy recientes y la pandemia ha conspirado contra su pleno desenvolvimiento, los productores tienen confianza en que contribuirán a dinamizar la producción de alimentos, como se ha comprobado durante los intercambios sostenidos con ellos por el Grupo Nacional de Viandas.

No obstante, señaló que aunque se aprecia una mayor conciencia en cuanto al cambio de mentalidad de consumidores a productores, urge generalizarla, pues todavía hay tierras, patios y áreas pertenecientes a distintos organismos sin cultivar, las cuales pudieran tributar alimentos.

Al reflexionar sobre los brazos que trabajan la tierra, comentó que hay que ponerles una medalla en el pecho a todos los que se doblan en el surco. Sostuvo que lo más importante para producir alimentos de manera sostenible es la integración, porque se requieren alianzas entre los investigadores y los productores, así como con los organismos de la Administración Central del Estado.

Asimismo, el diputado Luis Velázquez Pérez, presidente de la Academia de Ciencias de Cuba, se refirió a la preparación integral que deben recibir los actores que garantizarán la soberanía alimentaria. Apostó por que a partir de la aplicación de la ciencia y la técnica sea posible lograr un campo mucho más atractivo, que promueva el aumento de los productores, y logre el autoabastecimiento con un paradigma cambiado.

Estas y las recientes medidas para impulsar la producción azucarera coadyuvarán al desarrollo de la producción agropecuaria, sostuvo el parlamentario Ramón Aguilar Betancourt, presidente de la Comisión Agroalimentaria, quien dijo que hay medidas que pudieran estar en un estadio superior, pero se requiere de una mayor fiscalización de quienes deben velar para que avancen a mayor celeridad.

Entretanto, Jorge Luis Tapia Fonseca dijo que tenemos tierras en Cuba para producir alimento animal, como las plantas proteicas que sabiamente Fidel promocionó. También aludió a los subproductos de la industria azucarera para este fin, y a las formulaciones que han propuesto técnicos y científicos que se dedican a solucionar problemas que entorpecen la soberanía alimentaria en nuestro país.

«Si queremos desarrollarnos tenemos que hacerlo a partir de nuestros esfuerzos y sembrar las tierras vacías que todavía abundan. Si hay que invertir recursos habrá que hacerlo, pero lo viable es producir maíz, soya, sorgo… en Cuba», señaló refiriéndose a levantar la producción agropecuaria de manera general, pero sobre todo la porcina.

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