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Universidad de Oriente celebra su 75 aniversario. Autor: Maykel Espinosa Rodríguez Publicado: 10/10/2022 | 08:39 pm
SANTIAGO DE CUBA.—En su andar late el espíritu de una región. Cual el mejor símbolo de su estirpe mambisa, respondiendo al clamor popular por el centro de estudios superiores capaz de sustentar el progreso del Este cubano, se fundó el 10 de octubre de 1947 en acto solemne presidido por la campana de la Demajagua.
Desde entonces, el nombre de la Universidad de Oriente (UO), la segunda universidad pública oficializada en el país, está ligado a los afanes y desafíos de este lado cubano, como protagonista de sus principales sucesos.
Fue la primera universidad cubana en manifestarse contra el golpe de estado del 10 de marzo de 1952 y es alto el número de sus profesores y estudiantes que abrazaron las luchas del país; nombres como los de Vilma Espín, Frank País, José Tey, Oscar Lucero, José Mercerón, Enma Rosa Chuy, Cuqui Bosch, emergieron de sus aulas, y personalidades relevantes como Herminio Almendros, Juan Chabás, Nils Castro, Pedro Cañas, José Antonio Portuondo, Felipe Martínez Arango, Francisco Prat Puig, y muchos más, sembraron renovadoras concepciones que definieron su herencia revolucionaria en más de un campo.
El rigor de los programas de pre y posgrado es uno de los pilares de la gestión de excelencia por la que apuesta la UO. Foto:Comunicación UO
En sus predios, quedó constituido el gobierno de la naciente Revolución, el 1ro de enero de 1959, y relevantes personalidades de la política, la cultura y la sociedad de Cuba y otras naciones le han visitado.
Su nacimiento cambió la geografía de la Educación Superior en Cuba; fue madre y semilla que se multiplicó en siete nuevas universidades en la antigua provincia de Oriente; y tras su integración en 2015 con la Universidad de Ciencias Pedagógicas Frank País y la facultad santiaguera de Cultura Física, se empina hacia respuestas más eficaces a las necesidades nacionales.
En la histórica sede Antonio Maceo o en el campus Julio Antonio Mella se forman 21 087 futuros profesionales en 13 especialidades. Foto:Comunicación UO
Su excelencia académica se reconoce en el país y la región, y le ubica desde hace más de siete décadas a la vanguardia de los retos y realizaciones de la nación.
Siete décadas apegadas a las esencias
Este 10 de octubre la UO celebra su aniversario 75 y lo hace empeñada en ratificar y consolidar la condición de Excelencia, otorgada en el 2018 por la Junta de Acreditación Nacional; rendir homenaje a su vasta historia y tradición académica y encaminar desde la ciencia la resistencia creativa de la región y el país.
Así lo han definido sus autoridades universitarias. «Nuestro deber es continuar perfeccionando los procesos sin perder la esencia humanista y nuestra excelencia en la pasión de crear una sociedad sostenible que transite, con mayor intencionalidad, por los caminos de la ciencia, la tecnología y la innovación y certifique el posicionamiento de nuestra Casa de Altos Estudios en la esfera internacional», refería en mensaje por la celebración, la Doctora en Ciencias Diana Sedal Yanes, rectora de la UO.
El acto por los 75 años de la UO fue ocasión propicia para que varias instituciones, organismos, organizaciones y universidades de Cuba y Latinoamérica agasajaran al Alma Mater oriental. Entre los reconocimientos estuvieron el Escudo de la Ciudad de Santiago de Cuba, el Premio del Barrio de los Comité de Defensa de la Revolución, entre otros. Fotos: Maykel Espinosa
A las puertas del nuevo cumpleaños la UO trabaja por reafirmarse como una Universidad histórica, popular, formadora, científica, innovadora, patrimonial, tecnológica, joven en espíritu, contemporánea, pertinente y coherente con los procesos que se desarrollan en la sociedad, enfatizan sus estudiantes y profesores.
Sus logros más recientes dan cuenta de que su paso es sólido, y asume los rigores de los nuevos tiempos, pero sin dejar de ser consecuente con la divisa de Ciencia y Conciencia que ha guiado su vida académica por siete décadas y medias. Así lo refrenda el crecimiento sostenido de sus carreras y programas y los resultados de sus procesos fundamentales.
En sus siete décadas y media de existencia la UO ha entregado a la sociedad y otras naciones del mundo 71 749 nuevos profesionales en 57 carreras y hoy alberga en sus aulas, en sus cuatro modalidades de estudio, más de 21 000 estudiantes de territorios desde Guantánamo hasta Ciego de Ávila, y de países como Angola, Sudáfrica, Congo, Guinea Ecuatorial y Haití.
Convertirse en 2018 en la cuarta universidad cubana en recibir la categoría de Institución de Excelencia de la Educación Superior, como reconocimiento a la calidad demostrada integralmente en su gestión, marcó un hito en su andar y le abrió las puertas al pelotón de avanzada que integraban ya la Universidad de La Habana, la Universidad Central Marta Abreu, de Villa Clara y la CUJAE, y marcó su quehacer para el futuro.
En lo adelante no podremos desligarnos de una gestión de excelencia, como la mejor defensa del modelo de la universidad a la que aspira Cuba, insistía entonces la Doctora Diana Sedal, rectora de la UO.
Y tal pretensión es brújula en la consolidación de la cultura institucional alcanzada, que destaca por el rigor de los programas de pre y posgrado, el 60 por ciento de los cuales tienen categoría de excelencia; el potencial científico de su claustro, que alberga unos 500 doctores y más de 1 500 Máster en Ciencias; una poderosa actividad extensionista que trasciende los muros universitarios y vínculos cada vez más robustos con empresas y entidades, que desde 11 líneas de investigación ponen la ciencia y la innovación al servicio al desarrollo económico y social.
Un importante paso en ese camino de beneficiar cada vez más la producción y los servicios con los resultados de la investigación, lo vencieron en julio pasado con la oficialización —con la Universidad de Guantánamo como coaccionista—, de la Empresa de Ciencia, Innovación y Transferencia de Tecnologías CINTRO S.A., la cuarta Sociedad Interfaz de Ciencia y Tecnología que al amparo del Ministerio de Educación Superior (MES) se crea en el país.
Como expresión del prestigio internacional alcanzado recientemente la UO ha vuelto a posicionarse entre las 100 primeras universidades de la región según QS World University Rankings 2023, en su versión Latinoamericana. Desde hace dos años logró incluirse en el prestigioso ranking, y ahora se ubica en el lugar 95, lo que la ratifica como la segunda mejor posicionada entre las universidades del país, después de la UH.
Fotos: Maykel Espinosa
Asimismo, desde marzo del 2021 es el tercer centro de Educación Superior del país, cuyos inmuebles fundacionales exhiben la condición de Monumento Nacional de la República de Cuba. La declaratoria, que fue aprobada por la Comisión Nacional de Monumentos, reconoce los valores históricos, artísticos, arquitectónicos, ambientales y sociales que sintetizan siete edificaciones y dos espacios exteriores, que conforman el Conjunto Patrimonial de la sede Antonio Maceo, núcleo inicial de la añeja casa de altos estudios.
Aportar desde la investigación y la innovación a la solución de los problemas de la región es propósito de entidades de ciencia de la UO como el Centro de Biofísica Médica. Foto:Comunicación UO
Impronta y desafíos
Consecuente con esta poderosa huella, los actuales derroteros de la UO, están marcados por el desafío de ratificarse como una academia acorde con los requerimientos del contexto social, capaz de encontrar desde la ciencia la solución a los complejos problemas de este tiempo.
Según la doctora Sedal Yanes el nuevo aniversario ha sido también acicate en la materialización de altos empeños como la recuperación del complejo de sus residencias estudiantiles, uno de los mayores del país; y el mejoramiento de las condiciones de sus centros universitarios municipales y de investigación.
Aprovechar el potencial de sus especialidades para avanzar en la informatización de sus procesos; responder al reto de formar los profesionales que hoy necesita la empresa estatal socialista y contribuir desde los 30 programas de maestrías y 15 de doctorado con que cuentan, a afrontar urgencias como el diseño de las estrategias de desarrollo que garanticen la sostenibilidad de los municipios, son direcciones de trabajo que al decir de Sedal Yanes, encuentran igualmente motivaciones en el nuevo cumpleaños.
«La Universidad de Oriente tiene mucho que contar todavía; se nutre de sus creadores y de la trayectoria revolucionaria que acunó en sus predios», sostiene el Doctor en Ciencias Hebert Pérez Concepción, Premio Nacional de Historia en el 2018 y docente de la UO desde 1963.
Para el actual historiador de la casa de altos estudios oriental, es imperativo trasmitir a los más nuevos ese legado de compromiso, identidad y orgullo.
El joven Carlos Antonio Leyva, estudiante de 2do. Año de Ingeniería Química y presidente de la FEU de la UO, coincide; en su aula universitaria, dice, está su defensa desde el conocimiento útil, del futuro que le permita a Cuba salir adelante, y el mejor homenaje al pasado.
Y es que a sus 75 años, la UO, consecuente con su herencia, se transforma, crece. En sus aulas, laboratorios, residencias, se empina el progreso del Oriente, y su sonrisa es mambisa.
