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Teletrabajo: sí, pero no

Al inicio de la pandemia de la COVID-19 el trabajo a distancia se mostró como una alternativa viable y se predijo que sería el futuro, especialmente en la industria tecnológica. Hoy los directivos de las mayores empresas del sector reevalúan su conveniencia

Autor:

Yurisander Guevara

El director ejecutivo de OpenAI, Sam Altman, dijo la pasada semana que la idea de que el teletrabajo se extienda entre las compañías tecnológicas y se convierta en la norma es «uno de los peores errores de la industria en mucho tiempo».

«Diría que el experimento sobre eso ha terminado, y la tecnología aún no es lo suficientemente buena como para que las personas puedan estar completamente remotas para siempre, particularmente en las nuevas empresas», agregó, según Fortune, quien encabeza la compañía que ha puesto en marcha la revolución de la inteligencia artificial con ChatGPT.

Altman no es el único que piensa de esa manera. Todavía joven en el «estrellato» tecnológico, sus ideas son respaldadas por otros pesos pasados como Mark Zuckerberg, al frente de Meta, la compañía que engloba a Facebook, WhatsApp e Instagram.

Otros directores ejecutivos han estado exigiendo que los empleados remotos pasen más tiempo en la oficina, entre ellos Bob Iger en Disney, Howard Schultz en Starbucks y Robert Thomson en News Corp.

Donde dije Diego…

Durante la pandemia, el trabajo remoto o un horario de trabajo híbrido fue la única opción para no pocas personas, y muchos llegaron a preferirlo a estar en la oficina todos los días de trabajo.

En mayo de 2020, Mark Zuckerberg le dijo a The Verge que quería convertir a Facebook en «la empresa más avanzada en trabajo remoto a nuestra escala». En los primeros meses de la pandemia, aseguró que los empleados podrían postularse para hacer su trabajo permanentemente remoto y predijo que la mitad de la empresa podría trabajar fuera de su sede física en cinco o diez años.

Pero en 2023 Zuckerberg afirma que «los ingenieros en persona hacen más cosas», y que Meta está reevaluando su enfoque de equipo distribuido, de acuerdo con un reporte del boletín Morning Brew.

Lo mismo sucede con Salesforce, una empresa estadounidense de software basado en la nube. Su director ejecutivo, Marc Benioff, se preguntó en una comunicación interna si la «productividad mucho más baja» de los empleados contratados durante la pandemia es «un reflejo de nuestra política de oficina», según CNBC.

Otros son más tajantes. Keith Rabois, socio general de la firma de capital de riesgo Founders Fund, dijo la semana pasada en The Logan Barlett Show que no cree en el trabajo remoto para las nuevas empresas, y agregó que ni él ni su firma invertirían en algo así. Los trabajadores más jóvenes, señaló, «aprenden por ósmosis» de una manera que requiere interacción en persona, y los supervisores descubren talentos ocultos observándolos.

Mientras tanto, en Lyft, el rival de Uber en apuros, el nuevo presidente, David Risher, ordenó a los trabajadores remotos que regresaran a la oficina la semana pasada, un día después de despedir a más de mil empleados, o alrededor del 26 por ciento de la fuerza laboral. Los empleados ahora tendrán que venir los lunes, miércoles y jueves, y se recomiendan los martes.

Muchos trabajadores remotos sostienen que laborar desde casa está bien y que no están ansiosos por volver a la oficina y las rutinas de transporte antes de la pandemia. En una encuesta de Pew Research publicada el mes pasado, el 56 por ciento dijo que trabajar desde casa les ayuda a cumplir con los plazos, mientras que el 37 por ciento aseguró que no ayuda ni perjudica.

James Clarke, al frente de la firma de marketing digital Clearlink, teme que los empleados puedan estar trabajando en secreto en varios empleos gracias al trabajo remoto, según publicó Fortune. También le preocupa que algunos puedan estar liberando tiempo usando herramientas de inteligencia artificial como ChatGPT y GPT-4 de OpenAI.

«Creo firmemente que las nuevas empresas necesitan mucho tiempo en persona, y cuanto más frágil, matizado e incierto sea un conjunto de ideas, más tiempo se necesita juntos», aseveró por su parte Sam Altman.

Una posible razón

Que el teletrabajo no sea la panacea prometida hace apenas tres años puede deberse a un hecho: Estados Unidos está experimentando la mayor disminución en la productividad de los trabajadores desde 1948, según una investigación de EY-Parthenon, y muchos ejecutivos se han apresurado a señalar el trabajo remoto como el principal culpable.

Para ello, se basan en estudios como el publicado por Nature Human Behavior, el cual encontró que trabajar de forma remota hizo que los empleados de Microsoft perdieran importantes oportunidades de aprendizaje al no codearse con compañeros de trabajo que no forman parte de su equipo inmediato.

Investigaciones más recientes, también publicadas por Nature, mostraron que interactuar a través de una pantalla puede hacer que los trabajadores tengan menos probabilidades de generar ideas. Ese es un problema para las empresas de tecnología que necesitan innovar más que la competencia.

Para muchos líderes de la industria, acceder a un grupo de talentos más amplio fuera de los centros tecnológicos tradicionales no es suficiente para compensar esos inconvenientes. Y a medida que disminuye la escasez generalizada de mano de obra y los despidos se extienden por Silicon Valley, las empresas ya no están en una guerra de beneficios para reclutar y retener a las mentes más brillantes.

Un futuro incierto

Si bien la forma de ver el trabajo remoto puede seguir evolucionando, este modelo de negocio flexible llegó para quedarse, considera un artículo en Business News Daily. Las opciones remotas pueden seguir creciendo a medida que los avances tecnológicos, como la inteligencia artificial, desempeñen un papel importante en la gestión del personal a distancia.

La transición a la supervisión de una fuerza laboral remota puede ser desalentadora, pero con la tecnología y empleados con la adecuada motivación, el proceso llega a ser fluido, considera la publicación. A largo plazo, dado que muchos empleados ahora esperan oportunidades de trabajo remoto, es importante adoptar la innovación en el lugar de trabajo, insta el artículo.

En 2019, alrededor del cinco por ciento del trabajo a tiempo completo se realizaba desde casa en Estados Unidos. La proporción se disparó a más del 60 por ciento en abril y mayo de 2020, en los primeros días de la pandemia de la COVID-19, detalló a CNBC Nicholas Bloom, economista de la Universidad de Stanford que ha investigado el trabajo remoto durante dos décadas.

Eso es el equivalente a casi 40 años de crecimiento previo a la pandemia prácticamente de la noche a la mañana, muestra su investigación.

Para Bloom el futuro es de un modelo híbrido, en el que empleadores y trabajadores convengan horarios flexibles y posibilidades de trabajar desde casa, sin desechar la oficina.

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