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Gobernador de Texas pone en peligro vidas de migrantes

El traslado de másd de un centenar de migrantes desde Texas hasta la capital estadounidense se produjo en medio del histórico temporal invernal Elliot, una bomba ciclónica causada por un frente de aire ártico que ha sumido a Estados Unidos en un clima gélido que ha provocado la cancelación y retraso de vuelos, el colapso de carreteras y los cortes de luz en varias partes del país

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Juventud Rebelde

WASHINGTON, diciembre 26.— Tres autobuses que transportaban entre 110 y 130 migrantes llegaron a las afueras del Observatorio Naval, la residencia oficial de la vicepresidenta de EE. UU., Kamala Harris, en Washington D.C., el sábado por la noche, donde fueron recibidos por una organización benéfica local y trasladados a un refugio temporal en una iglesia cercana. 

Un representante de SAMU First Response reconoció que la agencia de socorro había estado esperando las llegadas y estaba lista para sacar a las familias del frío, mientras que una cadena local de restaurantes donó la cena y el desayuno, reportó RT. 

Acusando a las autoridades de Texas de abandonar a personas en la «víspera de Navidad más fría registrada en Washington», los medios locales compartieron videos inquietantes de familias con niños, envueltos en mantas, recargando sus pertenencias a otros autobuses.

Tatiana Labord, de SAMU, dijo que se esperaba que la mayoría de las llegadas permanecieran en Washington solo brevemente, ya que se dirigen a «otros destinos».

Las autoridades de Texas no han confirmado ni negado su participación hasta ahora, pero los demócratas acusaron inmediatamente al gobernador Greg Abbott, argumentando que el truco publicitario estaba «en línea» con sus acciones anteriores y las de otros gobernadores republicanos. 

«El gobernador Abbott abandonó a los niños al costado de la carretera a temperaturas bajo cero en la víspera de Navidad sin coordinar con ninguna autoridad federal o local», dijo el subsecretario de prensa de la Casa Blanca, Abdullah Hasan, en un comunicado,
calificándolo de «truco publicitario cruel, peligroso y vergonzoso».

La oficina de Abbott dijo la semana pasada que Texas ha transportado a más de 15 000 migrantes a ciudades «santuario» como Washington, Nueva York, Chicago y Filadelfia desde abril. No sería la primera vez que Abbott envía autobuses llenos de migrantes recién llegados a la puerta de la vicepresidenta Kamala Harris, quien ha visitado la frontera solo una vez desde que la administración Biden le encargó manejar la crisis migratoria allí el año pasado.

El gobernador de Florida, Ron DeSantis, también envió inmigrantes indocumentados a lugares exclusivos en el pasado. En septiembre despachó dos aviones cargados de migrantes al enclave isleño de Martha’s Vineyard, hogar de los Obama y otros pesos pesados políticos del Partido Demócrata.

Durante mucho tiempo ha pedido fondos federales para pagar la reubicación de inmigrantes ilegales que, según él, el Gobierno federal había enviado a Florida sin previo aviso o el permiso de las autoridades estatales.

El traslado de los migrantes desde Texas hasta la capital estadounidense se produjo en medio del histórico temporal invernal Elliot, una bomba ciclónica causada por un frente de aire ártico que ha sumido a Estados Unidos en un clima gélido que ha provocado la cancelación y retraso de vuelos, el colapso de carreteras y los cortes de luz en varias partes del país.

Las temperaturas bajo cero ocurren desde Canadá hasta Texas, además de intensas nevadas, fuertes vientos y lluvias en casi todo el territorio.

Al menos 200 millones de personas en Estados Unidos, el 60 por ciento de la población, han estado bajo alguna alerta por el clima, según el servicio meteorológico nacional de ese país.

El sábado del traslado de los migrantes, esa institución alertó que viajar por carretera en algunas zonas del medio oeste y noreste era «extremadamente peligroso e incluso imposible», y avisó de que «los vientos helados suponen un peligro mortal para los viajeros que queden varados».

Las autoridades estadounidenses aumentaron el domingo a 34 el balance de víctimas mortales por la tormenta invernal Elliot.

Este lunes, CNN reportó que al menos 25 personas murieron en el condado de Erie, estado de Nueva York que incluye a la ciudad de Buffalo, como resultado de la tormenta, dijeron funcionarios del condado, elevando el número de muertos en todo el país a 47. 

Otros estados donde se  registran fallecidos por la  tormenta son Ohio, Missouri, Kansas y Kentucky. También se reportaron fallecidos en Vermont, Colorado y Wisconsin.

 La gobernadora del estado de Nueva York, Kathy Hochul, advirtió que la cifra de víctimas fatales a causa del temporal podría aumentar en las próximas horas debido a que hay gente atrapada en viviendas y vehículos por las intensas nevadas.

La magnitud de la tormenta invernal Elliot abarca desde los Grandes Lagos, cerca de Canadá, hasta la frontera con México.

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