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TBILISI, Georgia, marzo 9.— El partido gobernante en la República de Georgia, Sueño Georgiano, retiró la controversial ley de «agentes del extranjero» luego de dos jornadas de protestas multitudinarias y violentas en esta capital, incluso hubo una sonada pelea en el interior del Parlamento, pero la oposición advirtió que realizarán nuevas demostraciones.
«Como partido de Gobierno responsable con cada miembro de la sociedad, hemos decidido retirar incondicionalmente esta ley que respaldábamos», dijo Sueño Georgiano en un comunicado conjunto con Fuerza del Pueblo, en el cual las dos formaciones afirmaron: «Ante todo debemos cuidar la paz, la tranquilidad y el desarrollo económico de Georgia, el avance de Georgia en la senda de la integración europea», reportó la agencia noticiosa alemana DW.
La nota subraya que la «máquina de la mentira» confundió a parte de la sociedad, ya que al proyecto de ley le atribuyeron la falsa etiqueta de «ruso», y su aprobación en primera lectura fue interpretada como una renuncia a la integración del país en Europa.
El proyecto de «Ley sobre transparencia en influencia extranjera» habría clasificado a las organizaciones no gubernamentales (ONG) y los medios de comunicación que están parcialmente financiados desde el extranjero (con al menos un 20 por ciento) como «agentes extranjeros».
En Rusia se adoptó una ley similar en 2012, que a su vez tiene un gran parecido con la Ley de Registro de Agentes Extranjeros Estadounidenses (FARA) de 1938, la cual establece la condición de agente extranjero no solo para los medios de comunicación y las organizaciones, también para personas naturales y jurídicas.
Según el Ministerio del Interior de Georgia, más de 130 personas fueron detenidas en Tbilisi en las protestas y enfrentamientos de los dos últimos días, en los que al menos 60 policías resultaron heridos. Los choques más recientes se produjeron la pasada madrugada, cuando efectivos antidisturbios despejaron de barricadas la avenida Rustaveli, la principal de la capital, donde los manifestantes quemaron dos automóviles, uno de ellos de la policía.
A pesar de la medida de retirar el proyecto, la oposición ha prometido continuar con sus protestas, citando la falta de confianza y el hecho de que las autoridades no liberaron a las personas detenidas durante los recientes disturbios, informó CNN.
