Chicos y grandes han tenido la oportunidad de disfrutar de un «verano retador, con variedad de opciones y tranquilidad ciudadana». Autor: Maykel Espinosa Rodríguez Publicado: 24/08/2019 | 09:45 pm
El final inevitable de la etapa estival se aproxima, y pareciera que ha sido tan breve, tan fugaz... Sin embargo música, deportes, libros, playas, ríos, rutas históricas, zonas jóvenes, campamentos de verano, carnavales, acampadas, bailables, programación televisiva y radial, festivales tecnológicos, ofertas gastronómicas, entre otras opciones, han conformado un variado menú para que chicos y grandes vivieran a plenitud un «buen verano».
Los aspectos positivos sobresalen sobre los negativos, como dijo recientemente el Presidente cubano al encabezar una reunión en la que se evaluó el programa de actividades recreativas planificadas en el país para los meses de julio y agosto, pero ello no debe nublarnos la vista ante lo que no ha salido bien.
Por lo pronto, habrá que decir adiós la temporada con todo, y disfrutar lo que aún queda de ella. Será precisamente en La Habana —que pronto arribará a sus 500 años de fundada—, donde se desarrollarán las actividades centrales por el cierre de la etapa. En esta Ciudad Maravilla, que se le quiere, desde dentro y desde fuera y que se renueva a todas luces, la jornada del próximo fin de semana ha de ser lo más grande, como mismo evoca el eslogan por su cumpleaños.
Y tiene que cumplir con esa certeza, porque para muchos, el cierre del verano comienza con la vuelta a clases de niños, adolescentes y jóvenes; así como del retorno de trabajadores, obreros y hasta de las familias que planifican su descanso laboral para estos meses. El final se acerca, pero septiembre es para todos sinónimo de aprendizaje, de explorar nuevos caminos y saciar la sed del conocimiento.