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La mujer cubana ha sido importante en el enfrentamiento a la COVID-19 desde diferentes sectores. Foto: Roberto Suárez Autor: Roberto Suárez Publicado: 02/10/2020 | 12:29 am
En nombre del Gobierno y de las mujeres cubanas, Teresa Amarelle Boué, secretaria general de la Federación de Mujeres Cubanas (FMC), intervino este jueves en la Reunión de Alto Nivel de la Asamblea de las Naciones Unidas sobre el aniversario 25 de la 4ta. Conferencia Mundial de la Mujer Beijing+25, que se realizó de manera virtual.
La líder de las mujeres de la Mayor de las Antillas expresó la satisfacción por la realización de esta reunión, aun en condiciones distintas, marcada por el impacto de la pandemia de la COVID-19 que demanda de la solidaridad con los pueblos y mujeres del mundo.
Amarelle Boué apuntó que a 25 años de la 4ta. Conferencia Mundial sobre la Mujer de la ONU, las cubanas podían mostrar progresos en el empoderamiento, fruto de la voluntad política del Estado y el Gobierno, expresados mediante la aplicación de leyes, políticas y programas.
«El bloqueo impuesto por el Gobierno de Estados Unidos contra Cuba, recrudecido ferozmente en tiempos de pandemia, por su impacto negativo sobre todos los aspectos de la vida del pueblo cubano, constituye el principal obstáculo para la realización de los derechos humanos de las mujeres y la forma de violencia más lesiva contra ellas».
A la vez, la Secretaria de la FMC consideró que aunque no es perfecta, nuestra sociedad «es una muestra de inclusión», y la nueva Constitución de la República «refrenda su compromiso con el principio de igualdad y no discriminación».
En la reunión virtual también se escuchó el rechazo y la denuncia cubana de que el Gobierno de Estados Unidos se empeña en vincular injustamente con la trata de personas a nuestras brigadas médicas que prestan servicio en diferentes partes del mundo, y se destacó que en la batalla contra la COVID-19 las cubanas han sido esenciales en las zonas rojas, en el diseño de los protocolos de actuación y en el proceso de investigación de candidatos vacunales.
Finalmente, Amarelle Boué dijo que las mujeres cubanas no estaban satisfechas con lo alcanzado y se requería seguir avanzando en pos de superar las brechas de género que aún subsisten. Aseguró que el Plan de Desarrollo Económico y Social hasta 2030 y el proceso de actualización legislativa del país, «refuerzan la voluntad de Cuba para eliminar toda forma de discriminación y violencia que persista y lograr la igualdad plena de derechos y oportunidades».
