Con la ayuda de 12 generadores de 100 kilovatios, este ingenioso sistema transmite electricidad al suelo mediante cables de anclaje. Autor: Tomada de Terra Publicado: 14/10/2025 | 10:41 am
BEIJING, octubre 14.- El S1500, con forma de dirigible y la turbina eólica voladora más grande del mundo, se convirtió recientemente en el primer dispositivo de su tipo en generar un megavatio de potencia durante un vuelo de prueba, informaron jubilosos ingenieros de China.
Las turbinas eólicas ya son una parte importante de la gran apuesta de China por las energías renovables, pero el país asiático siempre busca reducir los costos y aumentar la eficiencia de sus instalaciones.
Así fue como ideó una turbina inflable versátil, capaz de reubicarse rápidamente y generar cantidades significativas de electricidad. El sistema de energía eólica flotante tiene aproximadamente la altura de un edificio de 13 pisos y la longitud de una cancha de baloncesto.
Parece un motor de avión flotante gigante y es capaz de operar a alturas de hasta 1500 metros, donde los vientos son más rápidos y estables que a la altura de las torres tradicionales (aproximadamente 200 metros).
Desarrollada por la firma Beijing Linyi Yunchuan Energy Technology, la turbina eólica voladora más grande del mundo cuenta con una cámara principal de gas llena de helio y un ala anular que forma un conducto gigante que aprovecha los vientos estables de gran altitud para impulsar el rotor.
Con la ayuda de 12 generadores de 100 kilovatios, este ingenioso sistema de generación de energía transmite electricidad de forma constante al suelo mediante cables de anclaje.
Una de las principales ventajas de las turbinas en posición vertical es que no requieren la construcción de grandes torres y rotores metálicos, lo que puede reducir el coste por kilovatio-hora en un 30 %. Su diseño inflable también facilita enormemente su desplazamiento a largas distancias.
La empresa Beijing Linyi Yunchuan Energy Technology planea comenzar la producción en masa de las turbinas eólicas S1500 a partir del próximo año, pero aún quedan retos por superar, como los marcos regulatorios y las normas de seguridad, que demuestran la estabilidad de la instalación en condiciones climáticas extremas y la durabilidad de sus componentes, según reseñó el diario South China Morning Post.