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¿Para qué falsas esperanzas?

El pasado 7 de octubre, y desde Altahabana, en el municipio capitalino de Boyeros, Regla Caridad Verdecia Carrillo contaba aquí que después de muchos años de albergada por problemas de vivienda, en septiembre de 2012 le asignaron al fin un apartamento en un nuevo edificio. Y ya en mayo de 2013 comenzó a presentar filtraciones.

El problema, decía, se le informó a la ECAL 3, entidad que ejecutó el inmueble, a los gobiernos municipal y provincial, a Fiscalía en los niveles municipal y provincial, a la Asamblea Nacional del Poder Popular y al Consejo de Estado. Y a pesar de ello, el problema continuaba.

«Cuando llueve —afirmaba— el agua corre por lámparas y tomacorrientes, cae encima de los colchones. Se extiende por toda la casa. Esta severa filtración que está dentro de las paredes ha provocado el deterioro de los bloques; y, por ende, rajaduras en las paredes que van del techo al suelo».

Y alertaba del estado en que ya se encontraba el apartamento, muy preocupada por la salud de sus hijos y por el peligro que representa vivir allí. Añadía que en mayo último la visitó el Presidente del Gobierno en Boyeros, quien constató lo expuesto. Pero nada se resolvió. Con una tormenta por aquellos días se levantaron más las mantas y nadie había ido a defectar el problema, aun conociendo cuánto les aqueja.

Aún no hemos recibido respuesta al respecto, pero sí vuelve a escribir Regla Caridad, para contar que al siguiente día de la publicación visitó su apartamento una comisión integrada por la Directora Municipal de la Vivienda y el funcionario que atiende Construcción en el Gobierno, entre otros.

Corroboraron lo expuesto por ella, y le dijeron que en 48 horas le darían una respuesta. Dejaron sus números de teléfono para mantenerse en contacto.

«La respuesta —dice— todavía la estoy esperando. Y en cuanto al contacto, cuando lo intento no responden o lo hace la secretaria porque están reunidos. A raíz de esas evasivas me di la tarea de contactar con otras entidades, y recibí respuesta de la Dirección Provincial de la Vivienda: me informaron que mi expediente se encuentra en un archivo pasivo, pendiente de mantas, que no se sabe cuándo entran al país».

Sin embargo, añade, el funcionario que atiende Construcción en el Gobierno de Boyeros le aseguró que estaban comprando los materiales e incluso los estaban haciendo específicamente para el edificio, porque el arreglo debe ser en toda la cubierta, no solo en su parte del techo, dado que también hay afectación en otros apartamentos.

Regla Caridad pregunta: «¿Para que dan falsas esperanzas sobre algo tan serio que lleva siete años sin resolverse y ya atenta contra la vida de nosotros?

«Desde aquí exhorto a funcionarios a otros niveles que, por favor, vayan a mi vivienda y observen su estado crítico. Analicen si esto puede esperar siete años más.

«Lo que yo pueda describir aquí es poco o simplemente parecería una exageración. Si no lo tocan con sus manos no van a saber la envergadura de lo que aquí expreso. Y va a suceder lo peor.

«Lo vengo informando a todos los niveles. Luego de esto ya no hay solución, porque una disculpa o una nueva vivienda no tienen el valor de una vida perdida», concluye

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