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«La preparación y superación de nuestro personal docente y la nueva organización escolar, más flexible, que permita que nuestros centros escolares logren ser el lugar más importante de la comunidad, centra los debates de este Seminario Nacional de Preparación, que revisa lo realizado en el actual curso para proyectarlo hacia el próximo», expresó Cira Piñeiro Alonso, viceministra primera de Educación, en entrevista concedida a Juventud Rebelde.
«En el actual período escolar se implementaron adecuaciones en cada uno de los niveles de enseñanza, y hemos constatado en el intercambio con docentes, estudiantes y la familia, la satisfacción que hay por la forma más flexible en que se ha organizado la escuela, argumentó.
«Esta nueva organización permite a lo largo de todo el proceso docente realizar un grupo de actividades complementarias que contribuyen a esa formación integral que aspiramos para nuestros niños, adolescentes y jóvenes.
«También hemos constatado el agrado de los maestros por las adecuaciones al horario docente, porque les permite disponer de un mayor espacio, dentro de la propia jornada laboral, para su autopreparación».
Al referirse a este tema, la directiva recalcó que un elemento fundamental en el que deben seguir trabajando los docentes es en lograr elevar la calidad de las clases, para que impacte favorablemente en el resultado del aprendizaje de los alumnos.
«Por ello, en este seminario, donde preparamos el próximo curso escolar, damos espacio fundamental a los temas vinculados a debatir cómo mejorar la preparación metodológica que recibe nuestro personal docente», destacó.
Al preguntarle sobre el déficit de maestros, Cira Piñeiro puntualizó que algunas provincias como La Habana y Matanzas tienen dificultades con el completamiento de la plantilla.
«Se han concretado un grupo importante de alternativas para tener en cada aula un maestro, pero siempre se ha hecho con rigor y se ha dado un seguimiento.
«La inactividad y el éxodo de personal deben solucionarse desde la propia escuela, con la atención al maestro, ofreciéndole posibilidades de superación, atendiendo sus situaciones personales y familiares, para que se sienta reconocido y comprometido con su colectivo laboral y no abandone el sector para solucionar una determinada situación.
«Por otro lado, tenemos que continuar realizando una buena labor de formación vocacional, para garantizar las matrículas en las Escuelas Pedagógicas y en las Universidades, y así asegurar el revelo.
«Aspiramos a perfeccionar el sistema de trabajo de la escuela, para que lleven adelante sus propios proyectos educativos. Eso no depende de que digamos que hay flexibilidad, sino que se incorpore ese concepto al quehacer diario», agregó.
