Juventud Rebelde - Diario de la Juventud Cubana

¡Cara dura, pero perspicaz!

Autor:

Yailé Balloqui Bonzón

Cuando de ser creativo se trate, seguro hay que contar con el sueco Stanislaw Muchy, de 39 años, un imaginativo ladrón que encontró la forma perfecta para entrar a robar en empresas sin ser advertido: se enviaba a sí mismo por correo postal.

Una vez dentro del comercio, esperaba a que el último empleado se hubiera retirado para salir de la caja y echarse en el bolsillo cuanta cosa de valor encontraba.

Pero… al inteligente Munchy le faltó lealtad. Su cómplice, el encargado de llevar el paquete, lo delató a la policía cuando el jefe caco no quiso compartir la mitad del producto de la última fechoría.

Comparte esta noticia

Enviar por E-mail

  • Los comentarios deben basarse en el respeto a los criterios.
  • No se admitirán ofensas, frases vulgares, ni palabras obscenas.
  • Nos reservamos el derecho de no publicar los que incumplan con las normas de este sitio.