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Poco más de dos días quedan para el inicio de la nueva campaña de la Serie Nacional de Béisbol, máximo evento deportivo que acontece cada año en el país, y que por 57ma. vez mantendrá en vilo a un sinfín de aficionados en la Mayor de las Antillas.
Separada físicamente de la masa terrestre principal que compone al archipiélago cubano, en la Isla de la Juventud se habla en idioma béisbol por estos días, a propósito del alistamiento del equipo pinero de cara al clásico nacional.
Este miércoles, frente a la escalinata por donde salieran libres el 15 de mayo de 1955 Fidel Castro y los demás protagonistas de la gesta del Moncada, el camarero pirata Dainier Gálvez, escoltado por el cerrador Danny Aguilera y el lanzador Luis Manuel Suárez, recibió la bandera que acompañará al equipo local durante la venidera Serie Nacional.
Atletas y directivos firmaron el código de ética, y el serpentinero zurdo Yuniel Gamboa dio lectura al compromiso de los Piratas con énfasis en la disciplina, desempeño en el terreno y las aspiraciones de superar los resultados de la campaña anterior.
El artista de la plástica Antonio Lewis convirtió el abanderamiento en un momento especial, cuando entregó a miembros y directivos del equipo un cuadro al óleo con sus imágenes, señal de reconocimiento del arte y del pueblo por sus aportes al béisbol pinero.
En las palabras centrales, Yulexis Cruz Pico, primera secretaria de la Unión de Jóvenes Comunistas en este municipio especial, exhortó a los Piratas a ofrecer un buen espectáculo a la afición, ser disciplinados y a mantenerse dentro de los ocho finalistas, lo cual han logrado en varias ocasiones desde la implementación de esta estructura competitiva.
