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Daniel Gregorich debutó y llegó a ubicarse entre los 16 mejores del planeta. Autor: Abel Rojas Barallobre Publicado: 21/09/2017 | 07:03 pm
Que la 68va. edición del Campeonato Mundial de Lucha iba a ser un reto duro lo sabían todos. En un año como este —posterior a la Olimpiada— a priori podría pensarse que habría relajación, pero lo cierto es que un evento de nivel nunca deja de serlo, ya sea antes o después de la magna cita.
El comienzo para los muchachos de la modalidad grecorromana no pudo más que demostrar la dureza del certamen. Juventud y deseos no fueron suficientes para lograr un resultado espectacular, aunque no fue por dejar de intentarlo.
En la competencia, que acoge la AccorHotels Arena de la capital francesa, el primero en ceder fue el olímpico pinareño Yurisandy Hernández, al no poder sobrepasar al armenio Karapet Chalyan, quien se impuso con marcador de superioridad técnica (9-0).
De esa misma forma cayó en los 98 kilos Reinier Pablo Díaz, sustituto esta vez del subtitular bajo los Cinco Aros Yasmani Lugo. El espirituano fue derrotado con puntuación de 14-2 por Laokratis Kesidis, de Grecia.
Solo el habanero Daniel Gregorich llegó un poco más lejos, tras abrir con victoria por pegada frente al croata Iván Huklek, con pizarra de 5-2. Ya en los octavos, el alemán Denis Maksymilian Kudla no lo dejó avanzar, en lo que fue un combate en extremo disputado que acabó empatado 2-2, y se definió a favor del europeo.
En la fecha de hoy será el turno del resto de los grequistas, cuando salgan a «batirse» al colchón el santiaguero Miguel Martínez (66 kg) y el capitalino Oscar Pino (130 kg).
