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De una corona y sus casualidades

El equipo cubano masculino de balonmano se llevó el oro a casa este fin de semana en el Campeonato de Naciones Emergentes, venciendo a Chipre con pizarra de 28-18

Autor:

Javier Rodríguez

Un domingo de junio de 2019, el equipo cubano masculino de balonmano, ya en la final, no pudo con el juego planteado por el colectivo de Georgia, y con tanteador de 21-31 sucumbió, para así quedarse con la medalla de plata del Campeonato de Naciones Emergentes, cuya tercera edición se efectuó en la ciudad georgiana de Tbilisi.

Cuatro años después, el último domingo, y a la vez, el último día de abril, el plantel antillano, con varias de las figuras que quedaron subcampeonas en Tbilisi, emergió en la urbe búlgara de Varna con la corona de la más reciente versión, después de vencer a Chipre con pizarra de 28-18. Casualmente, la diferencia fue de diez goles, la misma con la que el conjunto insular fracasó en 2019.

Este título, sin discusión ninguna entre los tres mejores desempeños del movimiento deportivo cubano en los meses de 2023, se consiguió gracias a 123 goles (segundo del torneo) a favor y 92 en contra, y victorias sobre Gran Bretaña (32-28) y Guatemala (27-17) en la fase de grupos, ante Bulgaria (36-29) en semifinales y Chipre (28-18) por el oro. Por cierto, cuatro años atrás, los antillanos también doblegaron en semis al elenco búlgaro, solo que el marcador fue más reñido (39-36).

El director técnico de los vigentes monarcas, Jover Hernández, declaró a Juventud Rebelde: «Sabíamos que Chipre era un rival asequible, hicimos un análisis del contrario. A raíz de eso, planteamos nuestro sistema defensivo y ofensivo en función de lo que podía ocurrir en ese choque decisivo. Los muchachos comenzaron confiados, quizá porque se veían superiores, por eso en el primer tiempo pedí un time-out para darles un “apretón de orejas” y buscar que se enfocaran en el partido e hicieran lo establecido.

«A partir de ahí, las cosas comenzaron a fluir mejor, cada cual cumplió su objetivo, existió más dinámica y creatividad en el juego. La defensa se comportó bien y se pudo obtener este resultado. Estamos muy contentos por mejorar la actuación de la pasada edición. Era un propósito definido desde Cuba, que conversamos luego con los muchachos contratados en clubes extranjeros. Ya en la sede, lo reafirmamos, apostamos por esa primera posición. Después de vencer a Bulgaria, uno de los equipos más fuertes, supimos que el objetivo podría llegar con más facilidad, y así sucedió», aseguró el estratega de 39 años.

Si en la versión de 2019 el portero avileño Magnol Suárez y el habanero Eduardo Valiente fueron incluidos en el Todos Estrellas, en Varna, igualmente dos cubanos integraron el selecto grupo: el capitalino Hanser Rodríguez (MVP) y el villaclareño Lidier Vergara (Mejor Defensa).

El lateral izquierdo Rodríguez, activo en la primera división de Portugal, terminó quinto entre los mejores goleadores, con 27, mientras el matancero Ronaldo Almeida, Jugador del Partido frente a los chipriotas, sumó 20 (lugar 14).

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