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CARACAS, abril 8.— Miembros de grupos opositores de derecha en Venezuela continuarán hoy manifestándose contra el gobierno del presidente Nicolás Maduro, en una concentración prevista en la avenida Francisco de Miranda, de esta capital, informó PL.
Esa será la tercera movilización que anuncia la Mesa de la Unidad Democrática (MUD) para esta semana, donde han primado actos de violencia, violaciones de las rutas autorizadas para manifestarse y enfrentamientos contra la Guardia Nacional Bolivariana (GNB) y efectivos de seguridad.
Los opositores exigen la destitución de los magistrados del Tribunal Supremo de Justicia que emitieron recientemente las sentencias 155 y 156, que limitaba los poderes de la Asamblea Nacional (Parlamento, en desacato) y la inmunidad parlamentaria de los legisladores que transgredan la ley.
En opinión de expertos, esas marchas están dirigidas a generar el caos y la desestabilización de esta nación sudamericana.
Unido además a una guerra mediática orquestada por la ultraderecha reaccionaria, con apoyo del secretario general de la Organización de Estados Americanos (OEA), Luis Almagro, y varios gobiernos de la región, opinaron.
El dirigente del partido opositor Voluntad Popular, Freddy Guevara anunció ayer que los manifestantes se concentrarán a lo largo y ancho de la avenida Francisco de Miranda, y desde allí «anunciarán hacia donde se van a movilizar».
La víspera, el vicepresidente de Venezuela, Tareck El Aissami, explicó en un comunicado dado a conocer aquí, que la marcha convocada para este sábado carece de legalidad, ya que no fue notificada a las autoridades para proveer un plan de seguridad y organización.
«La naturaleza de esa convocatoria ya es violenta. Nos acabamos de enterar que quieren convocar a una concentración y una vez allí, es que indicarán adónde van. Están buscando una provocación, que detrás conlleva a la violencia. Es un acto que nace como violento», subrayó El Aissami.
Explicó además el dirigente que «si fuese una convocatoria pacífica y constitucional, tuviera un plan marcado e informado para que nadie sea utilizado en su buena fe para otros propósitos».
El vicepresidente hizo un llamado a la oposición venezolana para que retome el camino de la sensatez y de la constitucionalidad. «El derecho a la protesta pública es sagrado, pero no es absoluto. Es decir, yo tengo derecho a transitar libremente, pero no puedo transgredir el derecho de los demás ciudadanos.»
«No puede haber eventos públicos que no estén concertados en su organización con las autoridades -agregó-. Estamos obligados a que estos actores opositores tengan garantía de vida».
El líder del partido Voluntad Popular, Leopoldo López -hoy en prisión- fue el responsable de los actos violentos acaecidos en febrero de 2014, que dejó 43 muertos y centenares de heridos, según las autoridades venezolanas.
