Yairis López Ananias preguntó:
Ambas formas latente y latiente son correctas, lo que no significan lo mismo. La forma latente aparece en el Diccionario de la lengua española (RAE, 2001) como «oculto, escondido o aparentemente inactivo», ej. Aquella tarde exteriorizó su amor latente hacia Sofía. Por su parte la voz latiente aparece registrada en el Diccionario panhispánico de dudas (RAE, 2005) con la siguiente aclaración: latiente. Que late: «Se nos aparecía el corazón latiente de Santa Gema Galgani» (País [Esp.] 2.8.86); «En el cuerpo desollado y latiente había vida» (RBastos Vigilia [Par. 1992]). Esta es la forma correcta del adjetivo que procede del participio activo del verbo latir (dar latidos). No debe confundirse con latente (aparentemente inactivo). En otros contextos se utiliza latiente con el valor de presencia, visible, ej. La sustitución de importaciones es un tema latiente en la economía cubana. (Depto. Lingüística, ILL)
Yairis preguntó:
La voz latente aparece recogida en los diccionarios generales de la lengua consultados con el siguiente significado: latente. adjetivo. Que existe sin manifestarse o exteriorizarse: ej. enfermedad latente; muchos virus permanecen latentes durante un tiempo antes de manifestarse; un proceso químico convierte las imágenes latentes en visibles, bajo la forma de granos negros sobre fondo blanco. (Diccionario de uso del español de América y España, Vox, 2003). latente. 1. adj. Oculto, escondido o aparentemente inactivo. (Diccionario de la lengua española, RAE, 2001). Por otra parte, sobre la voz latiente señala el Diccionario panhispánico de dudas (2005): latiente. «Que late»: «Se nos aparecía el corazón latiente de Santa Gema Galgani» (País [Esp.] 2.8.86); «En el cuerpo desollado y latiente había vida» (RBastos Vigilia [Par. 1992]). Esta es la forma correcta del adjetivo que procede del participio activo del verbo latir («dar latidos»). No debe confundirse con latente («aparentemente inactivo»). (Depto. Lingüística, ILL)
BETTY RAMIREZ BALZA preguntó:
En el Apéndice 1 de la Ortografía de la lengua española (2010) aparece el listado de algunas de las abreviaturas convencionales más usadas en el sistema del español.
A continuación exponemos algunas abreviaturas recomendadas de títulos y profesiones: - Dir. (fem. Dir.a) para director. - Lic. (también Lcdo. o Ldo.) para licenciado,-da. - Mgtr. (también Mtr.) para magíster - Mtr. para máster, magíster (también Mgtr.) - Dr. (fem. Dra. Dr.a ) para doctor - Ing. para ingeniero En el caso de la abreviatura M.Sc., muy extendida, se trata de un préstamo del inglés.
Aclaramos que se aceptan las dos: M.Sc. (anglicismo) y Mgtr. o Mtr. (equivalentes en español); igual para doctor en ciencias: Dr.Sc. (anglicismo) y Dr.C. (equivalente en español).
La Ortografía de la lengua española (2010) explica que las abreviaturas son la representación gráfica reducida de una palabra o grupo de palabras, obtenida por eliminación de algunas de las letras o sílabas de su escritura completa.
Las abreviaturas españolas pueden acuñarse mediante contracción y truncamiento, y siempre se cierran con un punto, o barra inclinada en casos muy concretos. Pueden ser personales o convencionales, estas últimas son las reconocidas y empleadas comúnmente por lo usuarios de una lengua.
Entre las restricciones de uso de las abreviaturas convencionales están: que no pueden aparecer en cualquier punto de un texto, solo en contextos muy determinados como listas, fórmulas de tratamiento, saludo o despedida, y referencias o indicaciones escuetas de muy diversa índole; solo se usan antecediendo al nombre propio y nunca cuando forman parte de una denominación no referida a persona, como sucede en algunos topónimos. (Depto. Lingüística, ILL)
BETTY RAMIREZ BALZA preguntó:
En el Apéndice 1 de la Ortografía de la lengua española (2010) aparece el listado de algunas de las abreviaturas convencionales más usadas en el sistema del español.
A continuación exponemos algunas abreviaturas recomendadas de títulos y profesiones: - Dir. (fem. Dir.a) para director. - Lic. (también Lcdo. o Ldo.) para licenciado,-da. - Mgtr. (también Mtr.) para magíster - Mtr. para máster, magíster (también Mgtr.) - Dr. (fem. Dra. Dr.a ) para doctor - Ing. para ingeniero En el caso de la abreviatura M.Sc., muy extendida, se trata de un préstamo del inglés.
Aclaramos que se aceptan las dos: M.Sc. (anglicismo) y Mgtr. o Mtr. (equivalentes en español); igual para doctor en ciencias: Dr.Sc. (anglicismo) y Dr.C. (equivalente en español).
La Ortografía de la lengua española (2010) explica que las abreviaturas son la representación gráfica reducida de una palabra o grupo de palabras, obtenida por eliminación de algunas de las letras o sílabas de su escritura completa.
Las abreviaturas españolas pueden acuñarse mediante contracción y truncamiento, y siempre se cierran con un punto, o barra inclinada en casos muy concretos. Pueden ser personales o convencionales, estas últimas son las reconocidas y empleadas comúnmente por lo usuarios de una lengua.
Entre las restricciones de uso de las abreviaturas convencionales están: que no pueden aparecer en cualquier punto de un texto, solo en contextos muy determinados como listas, fórmulas de tratamiento, saludo o despedida, y referencias o indicaciones escuetas de muy diversa índole; solo se usan antecediendo al nombre propio y nunca cuando forman parte de una denominación no referida a persona, como sucede en algunos topónimos. (Depto. Lingüística, ILL)
Ani preguntó:
El Diccionario de la lengua española (RAE) recoge la voz lealtad con la siguiente definición: lealtad. (De leal). 1. f. Cumplimiento de lo que exigen las leyes de la fidelidad y las del honor y hombría de bien. // 2. f. Amor o gratitud que muestran al hombre algunos animales, como el perro y el caballo. //3. f. p. us. Legalidad, verdad, realidad. (Depto. Lingüística, ILL)
yeni preguntó:
Ambas formas aparecen registradas en el Diccionario de la lengua española (2001): lagaña. (De or. inc., quizá prerromano). 1. f. legaña. 1. f. Humor procedente de la mucosa y glándulas de los párpados, cuajado en el borde de estos o en los ángulos de la abertura ocular. En el Corpus de Referencia Actual (CREA) aparece documentada la voz lagaña en América; por su parte, el uso de legaña se reporta tanto en España como en América. También aparece registrada la voz lagaña en el Diccionario del español de Cuba (2000) con igual definición. Por lo tanto, el uso de lagaña es correcto, por su amplia difusión, sobre todo en el dominio hispanoamericano. (Depto. Lingüística, ILL) >
Yeny Cruz Martínez preguntó:
La voz leíamos es la forma conjugada en primera persona del plural, modo indicativo, tiempo pretérito del verbo leer. Está compuesta por cuatro sílabas pues tiene un acento hiático en la (i) que de vocal débil pasa a vocal fuerte por recibir la fuerza de pronunciación. Se divide de la siguiente manera: le-í-a-mos. (Depto. Lingüística, ILL)
Fabrizio preguntó:
La voz lente se usa tanto en femenino como en masculino: la lente, el lente. Al respecto señala el Diccionario Panhispánico de Dudas (2005): Es válido su uso en ambos géneros en cualquiera de sus acepciones, aunque las preferencias son distintas según las zonas; así, cuando significa 'pieza transparente que se emplea en instrumentos ópticos', en España se usa en femenino, mientras que en América alternan ambos géneros, con cierta preferencia por el masculino: «La distancia entre el foco y el centro óptico de la lente se llama distancia focal» (Portillo Energía [Esp. 1985]); «Se acerca al intruso camarógrafo e intenta tapar el lente de la cámara» (Alberto Eternidad [Cuba 1992]).
Lo mismo cabe decir de la expresión lente de contacto, femenina en España y frecuentemente masculina en América. Cuando significa 'juego de dos lentes con armadura para corregir defectos de visión', se usa en plural y normalmente en masculino en todo el ámbito hispánico: «Se quitó la barba postiza y los lentes ahumados» (Mendoza Ciudad [Esp. 1986]). Con este último sentido hay algún ejemplo esporádico de femenino en España: «Buscó las lentes en el bolso, se lamentó de lo poco que veía ya» (Delgado Mirada [Esp. 1995]). (Depto. Lingüística, ILL)
Jacinto Padrón Mirabal preguntó:
El Diccionario panhispánico de dudas de la RAE (2005) establece que la palabra libido, con el significado de «deseo sexual» es llana: [libído]. No es correcta, por tanto, la forma esdrújula *líbido*, debida al influjo del adjetivo lívido (amoratado o pálido), con el que no debe confundirse. Por otro lado, el Diccionario panhispánico de dudas de la RAE (2005) valida el uso del sustantivo lente en ambos géneros en cualquiera de sus acepciones, aunque las preferencias son distintas según las zonas; así, cuando significa pieza transparente que se emplea en instrumentos ópticos, en España se usa en femenino, mientras que en América alternan ambos géneros, con cierta preferencia por el masculino: «La distancia entre el foco y el centro óptico de la lente se llama distancia focal» (Portillo Energía [Esp. 1985]); «Se acerca al intruso camarógrafo e intenta tapar el lente de la cámara» (Alberto Eternidad [Cuba 1992]). Lo mismo cabe decir de la palabra lente cuando significa juego de dos lentes con armadura para corregir defectos de visión, se usa en plural y normalmente en masculino en todo el ámbito hispánico: «Se quitó la barba postiza y los lentes ahumados» (Mendoza Ciudad [Esp. 1986]). Con este último sentido hay algún ejemplo esporádico de femenino en España: «Buscó las lentes en el bolso, se lamentó de lo poco que veía ya» (Delgado Mirada [Esp. 1995]). (Depto. Lingüística, ILL)
Natalia preguntó:
En lo concerniente a la representación mediante palabras de las = unidades numéricas la Ortografía de la lengua española (RAE y = ASALE, 2010) refiere que (...) las entidades abstractas denominadas números pueden ser gráficamente representadas de dos formas: = mediante símbolos o cifras y mediante palabras, denominadas = específicamente numerales (...) los numerales, como palabras que son, = constituyen siempre un subconjunto del léxico de una lengua (...) y = su escritura debe someterse a las normas ortográficas (...) (Ver = Cap.VIII. Ap=E9ndice 3) (Dpto. de Ling=FC=EDstica, ILL)