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Son 48 las imágenes incisivas y de combate antimperialista que comprende la exposición de Tomy, y muestran la calidad expresiva de «un maestrazo de la plástica», como lo calificó el colega Ares (Arístides Guerrero) en sus palabras de presentación de la muestra. Autor: Yander Zamora Publicado: 21/09/2017 | 04:52 pm
CARACAS.— Una galería excepcional por su belleza y luz sirve de sede a la exposición de caricaturas políticas del destacado artista cubano Tomy, nacido como Tomás Rodríguez Zayas en Barajagua, provincia de Holguín: el Patio de los Leones del Palacio Municipal de Caracas.
Son 48 imágenes incisivas y de combate antimperialista que muestran la calidad expresiva de «un maestrazo de la plástica», como lo calificó el colega Ares (Arístides Guerrero), otra figura grande de este género, que han hecho dúo en Venezuela para impartir cursos de muralismo.
Precisamente en sus palabras de presentación habló del simbolismo de esta exposición, que sirve casi de colofón de los talleres donde han estado enseñando y aprendiendo de jóvenes de las brigadas muralistas del Frente Francisco de Miranda, y saluda el Aniversario 51 del Triunfo de la Revolución Cubana.
Esa hermandad la señaló al inaugurar la muestra el embajador cubano, Rogelio Polanco Fuentes, quien apuntó que venezolanos y cubanos «también tenemos en común el humor», y es un privilegio tener aquí a Tomy, amigo, compañero, colega, combatiente con el pincel, y contar con el arte, la cultura y el humor para enfrentar con una sonrisa cualquier adversidad, los problemas de nuestra sociedad y combatir al imperialismo.
Jorge Rodríguez, alcalde de Caracas, aseveró a su vez que Cuba y Venezuela somos una sola república hermanada por la construcción del hombre nuevo y una sociedad socialista. «Esta es la casa de ustedes, y con risas, ternura, poesía y la fuerza de la razón derrotaremos también el imperio».
Todos los temas salidos del tintero de Tomy reflejan una labor periodística diaria en las páginas de Juventud Rebelde, Granma, Revista Habanera, Rebelión y un sinnúmero de publicaciones cubanas y extranjeras. Tampoco su obra es ajena a los venezolanos, pues está presente en revistas como Patria Grande.
La estancia venezolana tampoco ha sido un obstáculo para su creatividad. Confiesa que, en los primeros días, no contar con su mesa de trabajo y el espacio habitual, más el cuarto de un hotel, le hizo sentir fuera de lugar, pero no tanto…
«En menos de dos meses he contado 62 dibujos. El curso, la transmisión de ideas a los muchachos, el seguimiento a los acontecimientos que nos son comunes: el golpe en Honduras, las bases militares, el ahorro energético y del agua, las agresiones del imperio, han sido los temas».
«Es que sigo siendo el mismo guajiro de Barajagua, con más experiencia, más canas y años, aprovechando la experiencia renovadora de Venezuela».
