Álvaro Uribe fue un impulsor de la salida militar frente a la insurgencia. Autor: Juventud Rebelde Publicado: 29/07/2025 | 09:36 pm
Bogotá, julio 29.— El dictamen de culpable emitido por la justicia colombiana contra el expresidente derechista Álvaro Uribe por los delitos de fraude procesal y soborno en acción penal, constituye un hito en la historia colombiana y ha provocado las esperadas reacciones de rechazo del jefe del Departamento de Estado, Marco Rubio, consideradas por el mandatario Gustavo Petro como una «intromisión en asuntos judiciales colombianos» que vulnera la soberanía nacional «y desconoce la independencia de la Justicia».
Rubio acusó a los jueces de haber sentado un precedente preocupante y, evidentemente sin argumentos, aseveró que «el único delito» cometido por el exmandatario y fundador del ultraderechista partido Centro Democrático había sido «luchar y defender incansablemente a su patria».
Cualquiera que siguiera los recientes acontecimientos en Colombia sabrá, sin embargo, que entre otros capítulos de su prontuario, Álvaro Uribe fue un impulsor de la salida militar frente a la insurgencia; pactó con los paramilitares raros acuerdos de desmovilización que los dejaron sobre las armas, e hizo parte de la maquinaria manipuladora de la opinión pública para que esta rechazara los acuerdos de paz firmados en La Habana por el entonces mandatario Juan Manuel Santos y los líderes de las FARC-EP en 2016.
Ello, sin contar los cargos que se le imputan, relacionados con su pago a falsos testigos para incriminar falsamente al senador Iván Cepeda, firme defensor de la paz, y quien ha llevado la voz cantante en esta querella que duró diez largos años.
Al responder a las declaraciones injerencistas de Rubio, el presidente Petro abordó, precisamente, la histórica violencia en Colombia relacionada con los paramilitares, se reconoció él mismo en sus tiempos de senador como víctima de falsas incriminaciones por su denuncia de esos males como Cepeda, y recordó los sucesos relacionados con el grupo paramilitar Metro.
En otro mensaje en X, el Jefe de Estado también solicitó a la Embajada de EE. UU. en su país no inmiscuirse, luego de recordar a Rubio el carácter independiente de la Justicia.
La condena a Uribe se conocerá oficialmente los próximos días, y se especula que sea entre seis y ocho años de prisión domiciliaria en atención a su edad.
El fallo es histórico, no solo porque se trata de la primera vez que se condenará a un exmandatario, sino porque este proceso se considera reparador del sufrimiento de los familiares y las más de 3 000 víctimas usadas como falsos positivos para aparentar avances en la lucha contra la insurgencia, así como de los miles de defensores de los derechos humanos y activistas sociales asesinados durante muchos años.
«Decenas de jueces, magistrados, fiscales han sido asesinados en su lucha contra el narcotráfico, y las relaciones del narcotráfico y el Estado colombiano», apuntó Petro en otro de sus mensajes en X.
Precisamente, a la jueza que lleva el caso, Sandra Liliana Heredia, se le ha reforzado la protección especial.