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NAIROBI.— La oposición kenyana llamó este viernes a sabotear las empresas vinculadas al presidente Emilio Mwai Kibaki, en su tercer día de protesta, como parte de una nueva estrategia de lucha antigubernamental, informaron agencias de prensa.
Entre las empresas que figuran como diana del posible boicot se encuentran la de productos lácteos Brookside Dairy Company —propiedad del ministro del gobierno regional, Uhuru Kenyatta—, las compañías de transporte público City Hopper —del consejero especial del presidente, Stanley Murage— y Kenya Bus Service, y el banco Equito, informó AFP.
Según esta agencia de prensa, las manifestaciones ocurridas en ciudades como Mombasa y la localidad occidental de Kisumu, fueron diluidas por la policía con gases lacrimógenos. Igualmente refiere que el saldo de esta jornada es de cinco muertos, cuatro en Nairobi y uno en Mombasa, provocados por impactos de bala de la policía, la cual prohibió las reuniones de todo tipo.
También señala que fueron hallados cinco cadáveres en Narok (suroeste) luego de enfrentamientos entre grupos rivales ocurridos en la víspera por la noche, según se cree.
Todas estas muertes, junto con otras 15 ocurridas desde el miércoles en esta capital, hacen un total de 25 occisos, según ha reportado AFP.
Por su parte, el Fondo de Naciones Unidas para la Infancia (UNICEF) estima que hay 100 000 niños desplazados, lo cual es casi la mitad del total de personas —250 000— que han tenido que abandonar sus hogares huyendo de la crisis política en ese país de África oriental.
Igualmente, según reportó PL, UNICEF expresó preocupación por los maltratos de niños kenyanos y por los índices de desnutrición en los campamentos de refugiados.
Sin embargo, la agencia de la ONU a cargo de los refugiados anunció la suspensión temporal de la ayuda humanitaria en Nairobi, debido a la ola de violencia registrada en estos días.
El movimiento social Kenyanos por la Paz con Verdad y Justicia, destacó que de continuar el conflicto, el país podría verse sumido en un colapso económico, político y social.
La agrupación —que reúne a 30 organizaciones de la sociedad civil kenyana— considera que su país se halla al borde de la desintegración y que ha provocado el exilio de 6 000 kenyanos hacia Uganda.
