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Moscú, abril 3.— Alexandr Grushko, viceministro de Exteriores de Rusia, advirtió este jueves que «el ingreso de Ucrania y Georgia en la OTAN será un gran error estratégico que tendrá las más graves secuelas para la seguridad europea», citó EFE. El comentario siguió al anuncio de consultas de la Alianza con esos dos países para su futura adhesión.
«El hecho de que hoy no se adoptara esa decisión, demuestra que en la OTAN aún existen fuerzas sanas capaces de valorar con cordura los contactos entre Rusia y la Alianza», dijo el jefe del comité de Exteriores de la Duma (Cámara Baja del Parlamento), Konstantín Kosachov, satisfecho por la decisión de no incluir a esos países en el Plan de Acción para la Adhesión (MAP), antesala del ingreso.
También quedó fuera Macedonia. Su canciller, Antonio Milososki, anunció que su delegación abandonaba la Cumbre en protesta por no haber sido invitada a ingresar en el pacto militarista, debido a la negativa griega.
«A nadie le importa que nuestros soldados arriesguen su vida en misiones de la OTAN con el nombre de Macedonia en sus uniformes», dijo enojado Milososki, en alusión a los 130 soldados que mantiene Skopje en Afganistán.
Grecia objeta ese ingreso hasta tanto no se resuelva la cuestión del nombre definitivo de la hoy conocida como Antigua República Yugoslava de Macedonia. Atenas teme que, si acepta el nombre de República de Macedonia, puedan brotar intentos anexionistas hacia la Macedonia griega, una extensa provincia septentrional.
«Nuestro país es la República de Macedonia, y así será para siempre», aseveró Milososki, quien agradeció los «sinceros esfuerzos» de George W. Bush, para promover su entrada en la OTAN, junto a Albania y Croacia, que sí obtuvieron el beneplácito unánime de los actuales 26 miembros.
Así, subraya AFP, Bush solo alcanzó una parte de sus objetivos, pues aunque obtuvo un reforzamiento del compromiso de sus socios en Afganistán, fracasó en la ampliación de la Alianza Atlántica en plena lucha de influencia con Rusia.
No obstante, arrancó al resto de los miembros de la OTAN un «saludo» a la «contribución» del futuro escudo antimisiles norteamericano en Europa, reportó AFP.
«Reconocemos la importante contribución en la protección de los aliados contra los misiles balísticos de largo alcance, que aportará el proyectado despliegue de elementos del sistema antimisiles norteamericano en Europa», afirma la declaración de los gobernantes de los 26 países de la OTAN.
