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La juventud no está perdida, hay que aprender a interpretarla

En el edificio Varona de la Universidad de La Habana, jóvenes militantes de la UJC centraron sus profundas y críticas intervenciones en el funcionamiento orgánico y en el trabajo político-ideológico dentro de la organización

Autor:

Raciel Guanche Ledesma

¿Cómo perfeccionar la UJC actual? ¿Qué hacer para convencer a más jóvenes a integrar las filas comunistas? ¿Cuántos de los que hoy militan se sienten en esencia comprometidos con ese ideal? Fueron estas algunas interrogantes lanzadas este miércoles durante el debate en la Asamblea de Balance de la Unión de Jóvenes Comunista en la Universidad de La Habana.

En el edificio Varona de la prestigiosa institución, jóvenes militantes centraron sus profundas y críticas intervenciones en el funcionamiento orgánico y en el trabajo político-ideológico dentro de la organización.

Uno de los primeros en tomar la palabra fue Raúl Escalona Abella, profesor de la Facultad de Comunicación, quien explicó que no existe hoy, en varios de los que ingresan a la organización, una idea clara del significado de la militancia juvenil y qué posturas tomar ante una realidad determinada. Y a expensa de ello, recordó, muchas veces se le dice a los estudiantes, sin más elemento que la orientación, transformen la realidad, y para lograr eso hace falta una formación educativa también.

Más allá de todo, aclaró Kissy Iznaga, estudiante de segundo año en el Instituto Superior de Tecnologías y Ciencias Aplicadas (INSTEC), un problema real es el trabajo de crecimiento en las provincias, porque el militante que llega a las filas de la UJC tiene que ser una persona que sienta verdaderamente, que sea comprometido, no que llegue para cumplir un plan de crecimiento de ese municipio o escuela.

Además, Kissy alertó, que vivimos en un escenario diferente, donde no se puede pretender atraer a un joven ni convencerlo hablándoles de la misma forma y con los mismos discursos ideológicamente obsoletos.

Otra estudiante, Nieves Molinas, reconoció que se debe pensar desde los comité de base y hasta las estructuras superiores, lo más realista posible, con ideas aterrizadas y sin falsas utopías. Y añadió, lo imprescindible es que nos guíe una idea en común. Tenemos que hacer pero sin imponer, sin que sea solo una orientación de «arriba», agregó.

Entre las intervenciones, la de Mario Ernesto Almeida, profesor de la Facultad de Comunicación, abogó por la realización de acampadas y excursiones como parte de la formación de valores. «Pero ello no significa simplemente dar el espacio y ya», recalcó. Cuán provechoso sería, dijo, pensar esas acampadas con una implicación social directa donde vayamos a lugares de nuestra geografía no como «turistas», sino para implicarnos realmente en estos espacios con su gente.

La épica del momento

Sobre el estado de la militancia, Raúl Alejandro Palmero, Primer Secretario del Comité Provincial de la Unión de Jóvenes Comunistas en La Habana, dijo que existen ciertamente personas con carné de la UJC que ni siquiera se identifican como jóvenes comunistas. Por eso quienes sí lo sientan sinceramente deben forjase con la épica del momento, y hoy se demanda en gran medida de la épica de los jóvenes, esa que se ha demostrado también en los últimos tiempos, recordó.

Palmero resaltó, además, la necesidad de continuar ganando espacios desde la UJC dentro de los distintos colectivos, grupos y espacios de jóvenes revolucionarios, como es el caso de La Comuna. Y que estos a su vez, se sientan partícipes del trabajo de la organización.

Para una universidad que cuenta con 1540 militantes actualmente, sus jóvenes no pueden estar buscando otros intereses personales dentro de la UJC. Ni pueden serlo por ir a una fiesta solamente, sino por un compromiso verdadero. Y aquí la juventud no está perdida, hay que aprender a interpretarla, reflexionó Roilán Rodríguez Barbán, miembro del Buró Provincial del Partido en la capital.

Es cierto que cada discurso debe asemejarse a los tiempos que corren. Al final, parafraseando a Raúl Roa, los jóvenes siempre son los mismos, lo que cambia son las circunstancias históricas, recordó Rodríguez Barbán.

Dentro de la organización, dijo, tenemos que buscar calidad y no cantidad, esa es una premisa. Sobre los planes de estudios hoy, agregó, jamás se puede perder de vista en ellos una formación humanística.

Como parte de la jornada, en la asamblea resultó electo el nuevo Comité de la UJC Universidad de La Habana, con Mario Ernesto Almeida, profesor de la Facultad de Comunicación, como su nuevo secretario general.

En la reunión estuvieron también la Doctora Miriam Nicado García, rectora de la Universidad de La Habana, y Yaliel Cobo, miembro del Buró Nacional de la UJC.

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