Frente al espejo
«Con gran alegría he leído el trabajo de Osviel Castro Medel y Aldo Daniel Naranjo titulado Una sola Revolución (10 de octubre). Pocas veces se da tratamiento tan detallado y acertado a un tema histórico complejo, pues en varios espacios escucho o leo pifias que no debieran producirse.
«Soy profesor de Historia de Cuba hace 40 años y puedo responder la pregunta que formulan en el artículo: ¿es que hemos contado y analizado la historia de manera vaporosa o de un modo tan ligero que no se prende en las mentes? Sí, en muchas oportunidades. En ocasiones hemos hecho de nuestros héroes y mártires seres tan perfectos que parecen inalcanzables. No son perfectos; si lo fueran quizá no habrían sido héroes. No se puede despojar la historia de sus matices más enriquecedores, ni se puede continuar diciendo Grito de Yara ni Grito de Baire. El último, incluso, nos hace reproducir la intención de la España colonial, que quiso reducir a Baire un alzamiento que conmocionó a todo Oriente y tuvo destellos en otras provincias. Solo se defiende lo que se conoce bien. Conocer nuestra historia es una vacuna perfecta contra muchas debilidades». (Arístides Rondón Velázquez)
«Recibimos con satisfacción el tema abordado por Julio Martínez Molina el día 16 de octubre de 2008 (La eterna reunión). El “reunionismo” es un mal que carcome a una sociedad como la nuestra y se expande más que el marabú, un lastre que entorpece la producción y los servicios en general, pues consume una gran cantidad de horas laborables a la par que disminuye en gran medida la motivación hacia el trabajo. Si diferimos en algún punto con la opinión es en lo relacionado al tiempo que pasamos reunidos, pues consideramos que Julio ofreció un dato bastante conservador. Sigan escribiendo con esa objetividad, que el pueblo cubano necesita y se lo agradece». (José H. Aparicio, Higor Atucha, Franklin de la Fuente y Cristóbal Galbán, profesores del Instituto Superior Pedagógico Pepito Tey, Las Tunas)
«¡Enhorabuena, Héctor Arturo! Por este medio le saludo y admiro por su artículo periodístico con motivo del aniversario de la caída del Guerrillero Heroico (Che en cuatro tiempos), en el que da usted una imagen del Che en toda su dimensión.
«Su trabajo posee la virtud de irradiar en los seres humanos más amor, tolerancia, sensibilidad para iluminar así los corazones y hacer reflexionar que por la vida no solo se pasa para “recoger”: así solo se está en un espacio y que solo se vive cuando das. Entonces te haces imperecedero... Así era el Che». (Dra. Elsa E. Olivares Sánchez)
«Soy una joven de 31 años, fiel lectora del periódico y sobre todo de la sección Sexo Sentido. Sus interesantes artículos y comentarios han sido de mucho interés para gran parte de la población que los lee y objeto de discusión en muchos círculos. Mis amistades y yo en muchas ocasiones los hemos debatido y aclarado muchas dudas además. Mi reconocimiento también a la sección Pregunte sin Pena... ¡Qué bueno saber adónde dirigirse cuando se tienen dudas y hace falta encontrar sabios consejos!». (Aileen De La Vara Matos)
«Me encanta la Tecla del Duende y la colecciono desde hace tiempo. Esa sección es como algo que necesito todas las semanas para poder seguir adelante. Quisiera ser integrante del grupo de tecleros. Un beso desde el centro». (Maday Pérez Gutiérrez, 1er. año de Comunicación Social, Universidad Central Marta Abreu)
Maday: los tecleros se pondrán muy contentos de tenerte entre ellos. Santa Clara tiene la suerte de poseer dos tertulias de la Tecla. La de la ciudad fue creada por Guillermo Cabrera el 23 de mayo de 2005, bajo los flamboyanes que dan sombra al niño de la bota del Parque Vidal. Tiempo después surgió la tertulia de la Universidad Central, que coordina la estudiante Annay Almeida, de 3er año de Comunicación Social.
Esta descripción te ayudará a encontrarla: siempre es tan alegre como un arroyo y tan traviesa como una mariposa. Ahora también es profesora de Secundaria Básica, de manera que está en más lugares que Francisca, aquel incansable y delicioso personaje de Onelio Jorge Cardoso.
Ella te dirá lo que todo teclero ya sabe: a la tertulia solo tienes que acudir con el deseo de «compartir un pequeño fragmento de un escrito, un verso o apenas un destello de eso que puede mover al mundo y que, a diario, nos escatimamos: una sonrisa», como diría nuestro colega José Aurelio Paz (El milagro de las teclas y los duendes, 30 de septiembre).
Me detuve en Annay, pero su nombre también puede ser Alicia en Holguín, Nayvi en Ciego de Ávila, Nieves en Las Tunas, Yasell en Bayamo, El Moro en Matanzas, Jenny y Carmen en la UCI... Lo importante es la modesta contribución que cada uno de ellos hace para acercar Juventud Rebelde a la condición de un periódico vivo y en el que los lectores sean compañeros en la aventura periodística. El 21 de octubre será nuestro cumpleaños 43 y ellos también merecen una felicitación.