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Reino Unido estrena primer ministro: Rishi Sunak

Sunak, un banquero de 42 años, tiene por delante resolver los graves problemas económicos de esta nación extra continental desgajada de la Unión Europea a regañadientes de no pocos súbditos, pero que comparte las actuales tribulaciones del Viejo Mundo

Autor:

Juana Carrasco Martín

Se retiran los rivales y el multimillonario Rishi Sunak será primer ministro del Reino Unido, el tercero en tres meses, el primero de «color» (nieto de inmigrantes indios) dicen quienes juzgan desde el racismo; otros argumentan que es muestra de la «diversidad y talento» del Partido Conservador, y el más joven con sus 42 años.

Ya no es necesario el voto en la agrupación política y solo necesitará el visto bueno del rey Charles III para que el crítico acérrimo de quienes le antecedieron, el controversial Boris Johnson y del programa económico de la efímera Liz Truss,  tome posesión del 10 de Downing Street.

Sunak, un banquero —que junto a su esposa Akshata Murty, hija de un multimillonario indio, está en la lista de los 250 británicos más ricos del país—, y ahora ex ministro de Hacienda o de Finanzas, tiene por delante resolver los graves problemas económicos de esta nación extra continental desgajada de la Unión Europea a regañadientes de no pocos súbditos, pero que comparte las actuales tribulaciones del Viejo Mundo.

Como era de esperarse, los Laboristas pusieron el grito en el cerrado y lluvioso cielo londinense y clamaron por una elección general adelantada —oficialmente debe ser en 2025—, con la aspiración de recuperar la jefatura de Gobierno. Ángela Rayner, líder adjunta de ese Partido señaló que Sunak fue nombrado «sin que él dijera una sola palabra sobre cómo dirigiría el país y sin que nadie tuviera la oportunidad de votar», a lo que agregó categóricamente: «Rishi Sunak no tiene mandato ni idea de lo que necesitan los trabajadores».

La temible inflación reina más que la familia real en el territorio británico, mientras la libra esterlina retrocedía frente al dólar. Se disparó nuevamente el índice de precios al consumidor y pasó del 9,9 por ciento en agosto al 10,1 por ciento en septiembre (datos de la Oficina Nacional de Estadísticas), y fue en la cesta de los alimentos el mayor repunte registrado en cuatro décadas (14,5 por ciento), acompañado de los alquileres de viviendas. Pero todavía no han alcanzado el máximo, dicen los entendedores.

Para agregar dificultades para la ciudadanía que debe despejar el neófito Primer Ministro pero experto administrador de los grandes financieros (Goldman Sachs incluido), el Banco de Inglaterra dijo que la economía del Reino Unido ya estaba en recesión: la producción del país se contrajo un 0,3 por ciento en agosto, tras una expansión de solo el 0,1 por ciento en julio, y las ventas minoristas cayeron un 1,4 por ciento en septiembre, peor de lo esperado, decía alguna prensa.

La situación contrasta con la situación financiera del designado, cuya fortuna familiar, dice The Guardian —incluida Akshata Murty, por supuesto—, suma más de 840 millones de euros, lo que le permite entre otros lujos la piscina cubierta en la casa de fin de semana que puede calentarse al costo de más de 16 000 euros al año.

Para el pueblo llano, las perspectivas de este invierno a las puertas son bastante sombrías, pero tienen Primer Ministro.

Coincidentemente, este 24 de octubre, los hindúes celebran el inicio de su fiesta más importante, el festival de las luces del Diwali, que conmemora la leyenda del regreso del dios Rama a su reino luego de 14 años de exilio. La familia Sunak probablemente las encenderá como es tradición para celebrar la entrada del año nuevo hindú: Según las creencias es el momento para renovar los libros de cuentas, hacer limpieza general, remplazar algunos enseres del hogar, pintarlo y decorarlo para el año entrante. ¿Servirá de agüero para el Reino Unido? Pocos creen en esa ilusión…

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